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España rechazará ampliar la UE si no se mantiene la minoría de bloqueo

Lluís Bassets

España está a punto de realizar numerosas concesiones a los cuatro países candidatos a la adhesión a la Unión Europea en agricultura, Unión Económica y Monetaria, aportación al presupuesto y pesca, después de haber cedido en otros temas, como las ayudas regionales. Fuentes de la Secretaría de Estado para Europa han asegurado a este periódico, sin embargo, que es "una cuestión de Estado" el mantener la actual minoría de bloqueo."Los dos países [Reino Unido y España] que quieren mantener la actual minoría de bloqueo tendrán la responsabilidad del fracaso", aseguró ayer el ministro griego de Asuntos Europeos, Teodoros Pangalos, que preside las sesiones de negociación.

La incorporación de los cuatro candidatos a la Unión cambia la correlación de fuerzas dentro del Consejo de Ministros, una institución que toma numerosas decisiones por la llamada mayoría cualificada de 54 votos sobre 76. Si se aplican mecánicamente las proporciones actuales a la nueva distribución de votos, la mayoría cualificada pasa a 64 votos sobre 90 y la minoría de bloqueo actual pasa de 23 a 27 votos.

España acepta esta última siempre que sea obtenida por tres países o el equivalente a 100 millones de habitantes. Italia se ha sumado también a última hora a esta posición. El Reino Unido quiere lisa y llanamente que las cosas se queden como están.

Las razones del Reino Unido son muy distintas a las españolas. Para el Gobierno de Londres el mantenimiento del actual sistema sirve para evitar la consolidación de la Comunidad. Para España, en cambio, es una posición mucho más instrumental y práctica.

Según los diplomáticos de la Secretaría de Estado para Europa, que siguen el día a día de las negociaciones comunitarias, este nuevo sistema es especialmente perjudicial para un país de tamaño medio como España, que fácilmente se puede encontrar aislado o con la necesidad de mendigar y pagar un alto precio por los votos de países pequeños.

Actualmente España, que cuenta con ocho votos en el Consejo, consigue con relativa facilidad reunir los 23 votos de países del Sur, pero en la nueva situación, en la que aquellos que se incorporan son países nórdicos, la política de alianzas española será mucho más difícil.

"País serio"

En las actuales condiciones, en cambio, los diplomáticos de la Secretaría de Estado consideran que es el único asunto en el que se enfrentan con una grave responsabilidad histórica y con la imposibilidad de ceder. Uno de los negociadores españoles, que prefiere quedar en el anonimato, asegura: "No somos un país grande, pero somos un país serio y que cumple sus compromisos. Con la minoría de bloqueo en 27 votos no seremos un país grande, pero además tampoco seremos un país cumplidor, porque no podremos impedir decisiones muy perjudiciales para nuestra economía que luego no podremos respetar".La cuestión central de la minoría de bloqueo puede situar a España esta noche, cuando han de terminar las negociaciones, en el epicentro de un terremoto si los cuatro candidatos consiguen resolver todos los otros problemas.

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Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

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