El Gobierno propone al PP un pacto urgente para el Defensor del Pueblo

Felipe González no se reunirá con José María Aznar para romper el bloqueo sobre el impulso democrático. La vía del Gobierno es otra: el llamamiento al consenso a los partidos, especialmente al Partido Popular (PP), para resolver elproblema más urgente: la cobertura de las vacantes institucionales -el Defensor del Pueblo y los cinco miembros del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ)-. Un problema fundamental porque va a cumplirse un año desde que estos puestos institucionales permanecen sin cubrir.

El ministro de la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, aprovechó la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros para exponer los criterios del Gobierno para desbloquear el contencioso. Pérez Rubalcaba manifestó que la próxima semana deben establecerse contactos entre el Gobierno y los partidos, especialmente el PP, para pactar los problemas más urgentes, en los que hay una aproximación de posiciones y en los que esté en juego el "normal funcionamiento de las instituciones y la percepción que de ella tienen los ciudadanos".Aunque no lo dijo expresamente, se estaba refiriendo a la cobertura de vacantes del Defensor del Pueblo y los miembros del CGPJ, que son los problemas más urgentes al cumplirse un año de este vacío institucional. "Tenemos necesidad de avanzar más deprisa. Hay temas que hay que cerrar rápidamente", añadió, aunque eludió fijar un plazo.

Rubalcaba también aclaró que, aunque la prioridad del Gobierno es llegar a acuerdos con el PP en estos temas, al necesitarse los tres quintos del apoyo parlamentario, el Ejecutivo también mantendrá contactos con los demás partidos.

El presidente M Gobierno, Felipe González, también aprovechó su comparecencia en el informativo Mesa de Redacción de Tele 5, en la madrugada de ayer, para exponer su punto de vista sobre esta negociación. González manifestó que los populares supeditan el asunto de la cobertura de vacantes a "otros ajenos". Se refería al Consejo de Administración de RTVE y, en concreto, a la sustitución del actual director general, Jordi García Candau. El secretario general del PP, Francisco Álvarez Cascos, así lo hizo constar en la reunión que mantuvo el pasado lunes con el ministro de la Presidencia. Para González ese "cambio de cromos" constituye una "perversión".

El "nacionalismo moderado"

También González criticó al PP por su actitud ante el "nacionalismo moderado" de CiU y PNV. A su juicio, hay una campaña "disgregadora y peligrosa" que arremete contra la enseñanza en catalán cuando es absolutamente razonable que cada uno hable "en la lengua de su tierra".

Volvió a hablar de campaña "desestabilizadora" apuntando al PP cuando dice que CiU ofrece su apoyo al Gobierno siempre a cambio de algo. "El PP alguna vez ganará las elecciones, pero no tendrá mayoría y tendrá que hacer compromisos; entonces pedirá que no haya campañas desestabilizadoras". A este respecto el secretario general de los socialistas vascos, Ramón Jáuregui, afirmó ayer que los populares están cometiendo un "error histórico", con la pretensión de impedir que los nacionalismos participen en la gobernabilidad de España.

González probablemente sorprendió a los suyos al afirmar que, si sus compañeros lo deciden, es "altamente probable" que vuelva a ser el candidato del PSOE en las "elecciones de 1997", con lo que aspiraría a un quinto mandato. González recordó que los comicios acaban de celebrarse, aunque reconoció que en la estrategia popular está hablar ya de adelanto de elecciones para 1995.

Dijo que lo entiende porque a los populares no les interesa que sean en su fecha, ya que en el 95 y en el 96 la situación económica en España será mejor.

El líder socialista rehuyó hablar de enfrentamiento en su partido y sólo reconoció que existe un "debate muy vivo". Negó que estuviera enfrentado con el vicesecretario general, Alfonso Guerra, del que dijo que es compañero y amigo desde hace muchos años. "Alfonso y yo hemos visto en estos años a varios presidentes del PP y del Partido Comunista", señaló para indicar la "estabilidad" del PSOE.

Reiteró su "deseo" de que Guerra estuviera en la próxima ejecutiva aunque dejó claro que por primera vez en 20 años iba a hacer personalmente la lista para someterla al congreso federal del mes de marzo. No quiso dar otros nombres, y al ser requerido para que opinara sobre el secretario de organización, Txiki Benegas, dijo: "Txiki ha hecho un trabajo magnífico y tiene muchos méritos para seguir en la ejecutiva al igual que otros compañeros".