Sobre oposiciones injustas

¿Se han planteado ustedes alguna vez quién está enseñando a nuestros hijos? En la última convocatoria, en julio de'1993, de oposición a profesor de enseñanza secundaria, prácticamente todos aquellos que han accedido a una de las 1.503 plazas eran interinos y la mayoría opositaba por una especialidad diferente.Gracias a que la Administración regalaba gentilmente a los interinos hasta seis puntos en concepto de "méritos" por sus años de trabajo, muchos de ellos han accedido a una plaza con una nota muy por debajo de 5 en la prueba de conocimientos (tanto teóricos como didácticos).

No pretendo constituirme en tribunal; sin embargo, no considero justo que personas con más de 9 en la prueba citada no hayan conseguido plaza porque a personas con un 3,5 les hayan regalado seis puntos.

La antigüedad sólo es mérito si el enseñante lo ha aprovechado para formarse e incrementar sus conocimientos; los años de docencia que no han servido para saber más deberían ser, incluso, un elemento paralizante.

Después de meses de estudio inútil, sólo me queda rogar a la Administración que, si las próximas oposiciones en este 1994 van a ser otro coladero de interinos, avisen.-

Miembro de la Coordinadora de Opositores de Enseñanza Pública.