El Congreso de EE UU investiga una inversión en Banesto de 35.700 millones de pesetas

El presidente del Comité de Banca de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Henry González, ordenó ayer una investigación para comprobar si al contribuyente norteamericano le va a costar dinero la crisis desatada en el Banco Español de Crédito (Banesto). Según González, la Unión Central de Crédito de Estados Unidos, la entidad que reúne a todas las cooperativas de crédito del país, invirtió el año pasado 255 millones de dólares (35.700 millones de pesetas) en Banesto sin haber tenido en cuenta la situación de alto riesgo en la que se encontraba ese banco.Henry González ha pedido a la National Credit Union Administration (NCUA), el organismo que controla las actividades de las cooperativas de crédito y de la Unión Central de Crédito (TIS Central Credit Union), que presente al Congreso todos los datos disponibles sobre el crédito entregado a Banesto y sus posibles consecuencias en Estados Unidos. El comité de Banca ha convocado una audiencia para el próximo 1 de febrero a la que acudirán Larry Lindsey, de la junta de gobernadores de la Reserva Federal; Eugene Luwig, controlador del Currency (funcionario); Jonathan Fiecliter, director en funciones del Organismo de Supervisión; Andrew Hove, director de la Corporación federal de Seguros de Depósitos.

"El comité de Banca y Finanzas está examinando los lazos del sistema financiero de Estados Unidos con el Banco Español de Crédito, recientemente quebrado en España. El comité requiere su ayuda en esta investigación", afirma la carta dirigida por Henry González al presidente de la NCUA, Norm D,Amours.

El citado comité de la Cámara afirma que la Unión Central de Crédito invirtió directamente en Banesto (no a través de Corsair) 255 millones de dólares en certificados de depósito de 90 días renovables que vencen el próximo mes de junio.

Garantía del Gobierno

En su respuesta al comité, D,Amours asegura que su informe estará listo en un plazo máximo de seis meses. Pero anticipa que los primeros 10 millones que debía Banesto fueron pagados con intereses a la Unión Central de Crédito el pasado 21 de enero, como estaba previsto. D,Amour añade que el organismo que preside está ya trabajando en el total esclarecimiento del asunto.

La carta de Henry González añade que "el comité ha sabido que la Unión de Central de Crédito de Estados Unidos, una unión de crédito corporativo basada en Overland Park (Kansas), tiene una significativa relación financiera (se trata de un depósito de 255 millones de dólares) con Banesto".

Un portavoz de la comisión de Banca de la Cámara de Representantes dijo a El PAÍS que "lo que se trata de averiguar es si el Estado va a tener que acudir en ayuda de una entidad que no fue lo suficientemente prudente en sus inversiones".

La Unión Central de Crédito de Estados Unidos es la cabeza gestora de las cooperativas de crédito del país. Su poder es tal que la prensa se refiere a ella frecuentemente como "el banco central" de las cooperativas de crédito. Es una institución 100% privada y sin fines de lucro, que se dedica únicamente a prestar a sus propios cooperativistas. La inversión en Banesto era una operación no asegurada que pretendía sacar rendimiento a los fondos de los cooperativistas en beneficio únicamente de esos cooperativistas. Los miembros de la Unión Central de Crédito son entidades y no personas individuales.

La intervención de la Administración Nacional de Uniones de Crédito (NCUA, en sus siglas en, inglés), un organismo oficial que controla las actividades de la cooperativas de crédito, se debe a que la Unión Central de Crédito había pedido la garantía de la NCUA, al menos para algunas de: sus operaciones. La Unión de Crédito Central había obtenido en. 1992 un estatus que la incluía entre las entidades a las que protege la NCUA.

La Unión Central de Crédito había hecho también en el pasado inversiones de alto riesgo en el Banco Nationale del Lavoro, la entidad implicada en el escándalo de la concesión de créditos al Gobierno de Irak. En la actualidad el volumen total de inversiones de la Unión Central de Crédito en el mundo asciende a cerca de los 16.000 millones de dólares.

La preocupación ahora del Congreso obedece a la posibilidad de que, si la operación de Banesto respaldada por la NCUA- acabase en fracase, la NCUA tendría que acudir al comité de Banca de la Cámara de Representantes en solicitud de fondos para los cooperativistas de la Unión Central de Crédito. Es decir, lo que el Congreso quiere saber es si 255 millones de dólares los van a tener que terminar pagando los contribuyentes norteamericanos.

El director de control de créditos de la NCUA, Michael Riley, comentó que comprendía la preocupación del Congreso norteamericano, pero dijo que habían recibido "garantías del Gobierno español" que aseguraban la operación de la Unión Central de Crédito.

Esta iniciativa del congresista Henry González demuestra la preocupación que la intervención de Banesto, ocurrida el 28 de diciembre del año pasado, ha despertado en los ambientes financieros norteamericanos, e incluso en el Gobierno. Es destacable el hecho de que el comité de Banca se haya ocupado de este asunto el mismo día en que el Congreso reanudaba sus actividades después de las largas vacacionés de Navidad.

Henry González es un representante demócrata del Estado de Texas, caracterizado durante su carrera política por una gran independencia y por su audacia para plantear en su importante comité los asuntos más polémicos. González quiere aprovechar las dudas desatadas con relación a la inversión de Banesto para investigar, no sólo la relación entre la Unión Central de Créditos y el banco español, sino el tipo de garantías que toma esta institución y su verdadera relación con las agencias del Gobierno.