"Los pasquínes, pidiendo órganos son inútiles"
Un médico de 44 años, Rafael Matesanz, tiene la última palabra en la distribución de órganos para trasplantes. Dice que empapelar el metro con peticiones desesperadas no sirve.
Rafael Matesanz, coordinador de la Organización Nacional de Trasplantes, siempre mira de frente y a los ojos. Este nefrólogo ha logrado que la institución que dirige desde 1989 haya conseguido que España tenga el mayor índice de donaciones del mundo. Sin embargo, y a pesar de sus éxitos, se encuentra molesto por la proliferación de llamamientos angustiosos de familiares de personas necesitadas de un órgano.Pregunta. La semana pasada la familia de una mujer empapeló el metro de Madrid con pasquines pidiendo un hígado para ella. ¿Sirvió para algo?
Respuesta. Rotundamente no. Nos regimos por criterios profesionales, no por sentimentalismo. Mantener la cabeza fría en estos casos sirve para salvar muchas vidas. Los esfuerzos de sus familiares y amigos fueron encomiables, pero inútiles.
P. ¿Cómo se distribuyen los órganos disponibles?.
R. Se establece una lista de prioridades con los pacientes necesitados. En la llamada "urgencia cero", se agruparían los casos más extremos, en los que si no se le realiza el trasplante, en un período inferior a 24 o 48 horas, el paciente moriría.
P. ¿Y eso suele ocurrir? ¿Mueren los pacientes en las listas de espera?
R. Sólo fallece el 5,8% de los enfermos mientras esperan su trasplante. No siempre hay órganos para todos en los momentos que se necesitan. Sin embargo, puede ocurrir también el caso contrario, que haya más órganos que enfermos en "urgencia cero" y en los siguientes escalones de prioridades. Entonces, y para que no se pierdan otras vidas, los "exportarnos". En los últimos años se han intercambiado cerca de doscientos órganos con países de nuestro entorno.
P. Luego, sobran donantes.
R. No. Son insuficientes, a pesar de que nos acercamos al nivel máximo de donación que puede existir en un país. Actualmente España es la nación con mayor índice de donaciones del mundo. Por lo tanto, mientras las peticiones siguen aumentando, el número de órganos disponibles se mantiene. Cada vez los equipos médicos recomiendan transplantes a más personas mayores de 70 años.
P. ¿Existe el enchufismo en los trasplantes?
R. Tajantemente no. Le repito que sólo nos regimos por parámetros médicos. Si esa idea se consolida entre la población, todavía existen posibilidades de mantener el número de donaciones. En países como Francia en donde se descubrieron casos de amiguismo, las donaciones se desplomaron en pocos meses.
P. ¿Le han presionado alguna vez para que dé prioridad a algún caso?
R. Con tristeza tengo que decir que sí. Fue gente importante, a la que no hice ningún caso. No merecían otra cosa. (Se le ensombrece el rostro).
P. ¿Qué piensa de los casos en los que se cambia un riñón, por ejemplo, por un puesto de trabajo?
R. Son ilegales e irreales. Ni ningún juez daría por válida una proposición de ese tipo.
P. El tráfico de órgano embargo, existe en España.
R. No. Ningún hospital español efectuaría una operación de esa clase. De todas formas hemos pedido a Sanidad que la inclusión en el nuevo Código Penal. Por si acaso...
P. ¿Le gusta su trabajo?
R. Sí, aunque es ingrato ¿Sabe el desgaste que se produce en gente que pasa el día pidiendo que se les permita extraer un organo a un ser querido que acaba de fallecer?. Un gran porcentaje de los coordinadores de zona tienen que ser relevados cada dos-tres años.
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