INTIMIDAD GARANTIZADA.
Tras múltiples y prolijos estudios sobre nuevos materiales, acaba de presentarse el nuevo diseño de cabina telefónica. El modelo piloto, instalado en la calle de Bárbara de Braganza, asegura una total insonorización y la absoluta intimidad visual. Abandonados los vetustos prototipos, que funcionaban con monedas o con tarjetas desfasadas, las comunicaciones se harán, según parece, utilizando un revolucionario combustible. En la imagen, un usuario con el depósito lleno se dispone a realizar, tal vez, una llamada internacional.
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