El retraso del presupuesto municipal impide que la EMT apruebe el suyo
El Consejo de Administración de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) retiró ayer el proyecto de presupuestos de sus gestores. Dichas cuentas ignoraban la subida de tarifas que aprobó el jueves el Consorcio de Transportes y que se fundaban en los presupuestos municipales, que todavía desconocen los grupos de la oposición. El PSOE pidió la dimisión del alcalde, José María Álvarez del Manzano, como presidente de la compañía. Fue rechazada, pero el vicepresidente, José Antonio García Alarilla, asumió la responsabilidad.
El retraso en la aprobación de las cuentas del Ayuntamiento para 1994 paraliza las previsiones económicas de las empresas municipales. El consejo de la EMT no tuvo ayer más remedio que aceptar las críticas de la oposición y retirar su propuesta para 1994.En el proyecto que presentaba el equipo gestor se hacía caso omiso de la subida de tarifas aprobada por el Consorcio de Transportes (un 6,9% de media) y se calculaban las aportaciones del Ayuntamiento en función de unos presupuestos que ni siquiera se han enviado a los grupos de la oposición.
Subida de tarifas
En su reunión de ayer, el consejo tampoco debatió los resultados de un estudio de gestión de la EMT que costó 10 millones de pesetas. Y tampoco aceptó la propuesta de convocar una junta general de accionistas (que se traduciría, en la práctica, en un pleno extraordinario).La Federación Regional de Asociaciones de Vecinos considera desproporcionada la subida -recién aprobada- de las tarifas del transporte y el sindicato UGT anuncia que la recurrirá formalmente. Aunque la media sólo dobla la inflación prevista por el Gobierno para este año (un 3,5%), el precio de los billetes más usados (los de diez viajes y el abono mensual) suben alrededor de un 9%.
Juan Barranco, portavoz del Grupo Municipal socialista, que se opuso a esa subida, explicó ayer que la discrepancia con sus compañeros de partido en la Comunidad de Madrid respecto al aumento de los precios de los transportes públicos responde a la actuación del Ayuntamiento.
"La Comunidad se ve obligada a subir los precios por encima del IPC porque el Ayuntamiento gestiona mal y no paga lo que debe", dijo Barranco. "Es un chantaje del Ayuntamiento al Consorcio de Transportes", sentenció. El portavoz socialista indicó también que el Ayuntamiento no ha pagado todavía los 950 millones de pesetas que cuestan los abonos de transporte anuales para los funcionarios. Sin embargo, el concejal de Personal, Antonio Moreno, desmintió ese extremo y afirmó que los trabajadores municipales tendrán su abono el año próximo.
El concejal socialista Eugenio Morales comentó que se opuso a la idea de instalar equipos audiovisuales en los autobuses. "Es inadmisible que se bombardee al ciudadano con publicidad mientras va al trabajo", afirma.
"Es increíble que el alcalde enarbole la auditoría de la gestión de la EMT para apoyar sus ansias de privatización de la empresa y luego Alarilla diga que el estudio no vale para nada", añadió Morales. "NI siquiera se ha fijado una fecha para debatir ese estudio y aprobar unos presupuestos coherentes", concluye. Barranco había comparado la actuación del alcalde en ese tema con la del "bombero pirómano".
Por su parte, el representante de IU en el consejo de la EMT, José Luis Pestaña, considera "la mentable" la reunión de ayer, puesto que obvió todos los temas importantes "y se dedicó a debatir chorradas como la instalación de televisores en los autobuses".
Este diario no logró ayer obtener la versión de algún miembro del Gobierno municipal.
Por otro lado, Morales anunció que el día 15 comenzará a funcionar un autobús ecológico (que utiliza gas natural) en fase experimental.
