Suspendida la cotizacion de La Unión y El Fenix por su fusión con AGF Seguros

La Corporación Banesto y la francesa AGF, principales accionistas de La Unión y El Fénix, con un 29% y un 24%, respectivamente, han llegado a un acuerdo para fusionar esta empresa con AGF Seguros, filial en España de AGF, según fuentes de Banesto. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) suspendió ayer la cotización de La Unión y El Fénix hasta que el mercado sea informado de los detalles.

La empresa resultante de la fusión de las aseguradoras, que deberá ser aprobada en una. próxima Junta General de Accionistas, tendrá un volumen de primas de 76.100 millones de pesetas y se convertirá en la cuarta del mercado español. Actualmente La Unión y El Fénix ocupa el puesto 12 y la filial francesa el número 22. La Unión y El Fénix, que durante 1991 contrató un volumen de primas de 73.897 millones de pesetas, cerró el pasado año con unas primas de 46.780 millones y unas pérdidas de 3.900 millones. Fuentes del mercado han señalado que podría tratarse del primer paso hacia la absorción de la marca de La Unión y El Fénix por el grupo francés.AGF Seguros está participada al 86% por AGF y -el restante 14% está en manos de La Unión y El Fénix. Fuentes de Banesto no han querido aportar más datos de la operación aunque han reconocido que se trata de racionalizar el negocio y de dar una mayor presencia en la gestión a los equipos franceses. Tampoco han querido precisar el reparto accionarial que propondrán a la Junta, si ésta aprueba la fusión.

La relación entre Banesto y AGF ha sido bastante accidentada desde que en el mes de mayo de 1991 Banesto daba entrada a AGF en el capital de la Unión y El Fénix. Para efectuar esta operación la Corporación Banesto y AGF decidieron constituir una sociedad holding a la que se transmitía el 52% de las acciones de La Unión y El Fénix. De ese holding, denominado Corporación BV, Corporación Banesto se quedó con el 55% y AGF el 45%. Es decir, que con esa operación la entidad francesa pasaba a tener de forma indirecta el 24% de La Unión y El Fénix y la Corporacción Banesto el 29%. Ambos porcentajes son los que se mantienen.

Eludir el fisco

La operación que idearon los técnicos de Banesto encontró reticencias en el Ministerio de Economía y Hacienda. Seis meses después el entonces titular de ese departamento, Carlos Solchaga, comunicaba a los responsables de Banesto que no aprobaba la operación por entender que se trataba de eludir el pago de 7.400 millones de pesetas al fisco. Tras un mes de intensas negociaciones, Economía autorizó la operación tras comprometerse Banesto a pagar esa cantidad al Estado.

Pero no acabaron ahí los problemas en la aseguradora española. Mario Conde, presidente de La Unión y El Fénix y de Banesto, reconocía en junio de 1992 unas pérdidas de 2.400 millones de pesetas en el ejercicio de 1991 y reconocía que eran "necesarios grandes cambios en la gestión".

En el mes de marzo del presente año y cuando comienzan a transcender las diferencias sobre la gestión de la aseguradora entre Banesto y AGF, los dos principales accionistas emiten una nota muy ambigua en la que dicen que "han decidido desarrollar un plan estratégico de acercamiento en un cuadro de participación accionarial recíproco".Las diferencias entre ambos socios quedan patentes un mes después, abril de 1993, cuando reconocen públicamente que no han alcanzado un acuerdo para un mayor intercambio accionarial al producirse diferentes valoraciones de los activos de AFG Seguros y La Unión y El Fénix. En el consejo del 28 de abril pasado los representantes de la aseguradora francesa deciden no aprobar las cuentas de la empresa sobre el ejercicio de 1992, y se inicia un enfrentamiento entre los principales accionistas.La Dirección General de Seguros, en vista de la situación de la empresa, impuso un plan de ajuste financiero y el director general de Seguros afirmó que se haría un seguimiento más detallado de la política de inversiones de La Unión y El Fénix.

Por otro lado la firma especializada Moody's anunció ayer que está estudiando rebajar la calificación del banco portugués Totta y Açores, entidad participada por Banesto. Las razones que aduce la agencia calificadora es la pérdida de calidad de los créditos.