La sociedad de valores con la que trabajaba el 'broker' Egea se querella contra Alfaro por estafa

La Corporación de Agentes de Bolsa (CAB), la sociedad de valores con la que trabajaba el broker suicida Baltasar Egea, ha presentado una querella criminal contra el empresario Benedicto Alfaro, su hija Mari Carmen y así como contra Tivsa y Asesores Agrupados, las dos sociedades controladas por el intermediario. CAB, que fue declarada en quiebra el pasado día 24 por un juzgado de Madrid, considera a Benedicto Alfaro "auténtico cerebro organizador y beneficiario de la gigantesca operación defraudatoria" y le acusa directamente de haber sustituido letras de cambio emitidas por él mismo "por otras nuevas letras en las que las firmas ( ... ) habían sido deliberadamente falseadas".

La querella considera que la actuación de Alfaro puede constituir delitos de estafa, apropiación indebida y falsedad en documentos mercantiles y ha sido presentada en el juzgado de Delitos Monetarios debido a que, según CAB, existe una evidente conexión con las diligencias 75 / 93 que el juez Miguel Moreiras tramita contra Alfaro por falsedad y estafa.En el relato de hechos de la querella, CAB explica el procedimiento seguido por los clientes del broker Baltasar Egea para invertir en bolsa a través de CAB. Los clientes entregaban el dinero a la sociedad Tivsa, de la que Egea era consejero delegado. Tivsa, a su vez lo remitía a su sociedad matriz CAB, para que lo invirtiera en activos financieros, generalmente letras del Tesoro. Cuando llegaba el vencimiento de la inversión o cuando se cancelaba anticipadamente, Tivsar remitia a CAB un formulario con las instrucciones a seguir, y CAB emitía los cheques correspondientes para Tivsa, con el fin de que esta última sociedad se lo hiciese llegar al cliente.

Inversiones canceladas

Sin embargo, a partir del suicidio del broker Egea, numerosos clientes de Tivsa reclamaron el reintegro de sus inversiones, dándose la circunstancia de que en la mayoría de los casos, CAB ya las había cancelado con Tivsa, si bien el dinero nunca había llegado a los clientes. [Tivsa es sociedad representante de CAB y por ley sólo puede trabajar para ésta. Sus ordenadores están conectados y CAB tiene acceso a toda la contabilidad de Tivsa]. CAB afirma que ya ha pagado sus deudas, aunque los clientes sostienen que ellos no han recibido el dinero.

En la querella CAB admite que no se han encontrado recibos justificativos de que 47 clientes de Egea que tenían inversiones por 888.274.039 pesetas hayan recibido el reembolso de su dinero.

La sociedad de valores precisa también que además de las reclamaciones que esos clientes de Egea han formulado contra CAB en varios juzgados de Vitoria y Madrid, otros clientes de CAB distintos a los mencionados y que habían adquirido activos financieros acudieron a sus oficinas, tras la muerte del broker, para reclamar sus inversiones.

Los activos financieros a que se referían las reclamaciones -según la querella- eran 51 letras de cambio, por importe de 296 millones de pesetas con vencimientos comprendidos entre el 11 de mayo y el 13 de octubre de 1993 y que "aparecían, todas ellas, libradas a la orden de Benedicto Alfaro por una entidad denominada Holding Alfaro, aceptadas por el Grupo Alfaro y endosadas en blanco por el señor Alfaro que, asimismo, aparecía suscribiendo a título personal las cartas de cesión y provisión de fondos de las mismas".

La inversión había sido recomendada por Egea a quien Alfaro le había encargado que obtuviera financiación para la expansión de sus empresas, lo que el primero hizo a cambio de las letras citadas. Los clientes de CAB han reclamado contra Alfaro pero éste se ha negado a abonar el importe. CAB sostiene que Alfaro ha falseado adrede las firmas para no hacer frente a los pagos.

La sociedad de valores, al presentar la querella contra Alfaro intenta, por un lado, esclarecer la actuación del empresario, pero, por otro, trata de personarse como perjudicada en las actuaciones que instruye Moreiras. No obstante, se da la circunstancia de que el juez de instrucción número 6 de Madrid que tramitaba tres querellas de clientes de Egea contra CAB y Tivsa se ha inhibido en favor del magistrado de la Audiencia Nacional por tratarse de casos conexos.

En caso de admitir la personación, se daría la paradoja de que CAB sería al mismo tiempo querellante y querellada. Tivsa ya Intentó sin éxito personarse como perjudicada en la causa contra Alfaro.