El Metro cierra este año el 'dormitorio' para indigentes

Las personas sin hogar no podrán cobijarse este año en la estación de metro de Tirso de Molina, contra lo habitual en años anteriores. Tanto el Ayuntamiento de Madrid como la empresa del Metro han señalado que sólo se utilizará la estación como dormitorio de indigentes en caso de absoluta necesidad, puesto que primero deben cubrirse las 110 plazas existentes en los albergues municipales. Estos se abren el próximo jueves.La concejal de Servicios Sociales, Ana María García Armendáriz, señala que en caso de que se abra alguna estación de metro se instaurarán servicios de vigilancia y medidas de higiene y sanitarias. Un portavoz del Metro señaló ayer que sólo siete u ocho personas utilizaban el año pasado como dormitorio los pasillos subterráneos.

Begoña San José, la concejal de IU que se ocupa de los temas sociales, se muestra partidaria de que algunas estaciones permanezcan abiertas en las noches de invierno, aunque afirma que es una solución discutible, "porque el número de las personas sin techo que existe en Madrid es muy superior al número de plazas municipales de albergues". San José añade: "Además, las personas que van a dormir al andén del metro suelen reunir el perfil del que se niega a utilizar el albergue municipal". Medida provisional

La concejal socialista Patrocinio de las Heras considera "inhumano" asumir la alternativa de convertir las estaciones de metro en dormitorios invernales para los vagabundos. "Se abrieron estaciones en 1989 como una medida de emergencia, pero ya han transcurrido los años suficientes como para que el Ayuntamiento tenga otra alternativa a este problema", critica la edil.

De las Heras propone que se pongan en marcha las casas de acogida, centros de atención especializada que ya funcionan en otras ciudades españolas. De esa forma se evitarían, según la concejal socialista, "los graves problemas de seguridad y de falta de higiene en las instalaciones del metro". De las Heras critica la falta de soluciones a este problema por parte de la concejal responsable del área. En opinión de la edil socialista sí existen otras medidas posibles, como "el trabajo con los organismos de voluntariado y otras asociaciones".

La Policía Municipal vigilará permanentemente los dos centros de acogida de la Casa de Campo para evitar altercados. Podrán acceder a los pabellones si se da algún incidente.