Los Doce señalan a EE UU como causante del bloqueo de la Ronda Uruguay del GATT
Los Doce señalaron ayer, sin divergencias en su seno, al auténtico culpable del bloqueo de la Ronda Uruguay del GATT: EE UU. El ministro de Exteriores francés, Alain Juppé, aseguró que Europa se está convirtiendo en el jamón del bocadillo americano, y se ve así obligada a intentar negociar entre el tope establecido por el congreso norteamericano para el 15 de diciembre y el aplazamiento hasta el 17 de noviembre, día en que debe aprobarse el Tratado de Libre Comercio con México y Canadá. El comisario europeo de Comercio, Leon Brittan, y el propio Consejo de ministros de Exteriores de la CE, celebrado ayer, reconocieron que el acuerdo final exigirá una votación unánime de los Doce.
Tanto Brittan, que está dirigiendo esta difícil maniobra como el Gobierno francés expresaron su satisfacción por el aparente arrinconamiento de Estados Unidos, que ha dejado de aparecer como acusador contra Francia para convertirse directamente, junto a Japón en el acusado.La satisfacción francesa fue doble. El comisario Brittan y el propio Consejo reconocieron que la finalización de la negociación exige una votación por unanimidad de los Doce, por lo que el voto de cualquiera de ellos significa la imposibilidad de cerrar la negociación. Algunas opiniones habían sostenido hasta ahora la posibilidad de decidir el acuerdo final por mayoría cualificada, cuestión que llevaba a Francia a sugerir que se acogería al derecho de veto invocando intereses vitales. Tras las aclaraciones ayer del Consejo no hay dudas: Francia puede vetar simplemente votando en contra.
Otro punto crucial del final de la Ronda uruguay requiere también la firma de cada uno de los Doce Estados por separado. Se trata de la creación de una Organización Mundial de Comercio, prevista en el borrador de conclusiones preparado por el anterior director general, Arthur Dunkel, en 1990. La Comunidad Europea pertenecerá a dicho OMC si se crea (no la Unión Europea que no tiene personalidad jurídica), pero también deberán pertenecer a ella todos y cada uno de los miembros de la CE.
El callejón sin salida en que parece hallarse la Ronda Uruguay, como resultado de la exclusiva preocupación norteamericana en el TLC con México y Canadá, ha llevado a los Doce a proponer que se cierren a finales de noviembre "las grandes líneas del acuerdo general". Un Consejo de Ministros extraordinario será convocado para finales de este mes para permitir la toma de decisiones, una vez Washington empiece a mover sus peones.
La 'culpa' norteamericana
La explicitación de la culpa norteamericana y japonesa se debe, principalmente, al éxito de la estrategia de Brittan, que ha presentado un ejemplo ilustrativo de la apertura de mercados que ofrece la CE en aplicación del acuerdo de la Cuatrilateral firmado por Estados Unidos, Japón, Canadá y la propia CE en julio pasado en Tokio. Ninguno de los otros tres socios ha sido capaz de responder a la oferta europea más que con el silencio. Han aparecido también nuevos argumentos contra la finalización de la Ronda en Washington, pues se ha puesto en duda la solidez del acuerdo de Tokio, a pesar de que en su momento los propios norteamericanos lo presentaron como la mayor supresión de aranceles de la historia.
La propuesta europea trata, principalmente, de los llamados picos tarifarios (aranceles muy altos, superiores al 15% que se convierten en obstáculos a veces insuperables para el comercio). La CE sugiere recortar como mínimo el 50% de las tres cuartas partes de los picos y significa una reducción generalizada de aranceles, que implica importantes sacrificios según algunos socios.
La oferta europea pone de relieve la sobreprotección de los mercados norteamericano y japonés: 663 picos tarifarios en Estados Unidos, 457 en Japón, frente 101 en la CE; ninguna tarifa prohibitiva de más del 25% en la CE, 186 en Estados Unidos, 46 en Japón. Para el caso norteamericano, considerado como el más grave por la CE, los picos afectan a 17.000 millones de ecus de importaciones, mientras que en la CE significan sólo 1.800 millones de ecus.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.