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Noche de libros y guitarras

Una huelga de estudio 'a la japonesa' coincidió con el ambiente festivo de los encierros de estudiantes

VIENE DE LA PÁGINA 1Los estudiantes de Medicina de la Universidad de Alcalá de Henares decidieron sacarle el máximo rendimiento a las 88.000 pesetas (en primera convocatoria) que este año han pagado de matrícula y se encerraron en la biblioteca para estudiar durante toda la noche. Antes habían informado al decanato y a la gerencia, quienes les facilitaron hacer una huelga a la japonesa: mantuvieron abierto el recinto, con una bibliotecaria, para que las condiciones fuesen parecidas a las habituales. Hubo también un servicio de vigilancia con cuatro guardas jurados.

La biblioteca suele cerrar a las once de la noche. Pasada esta hora, unos 300 alumnos ocupaban los bancos de estudio. Algunos se habían desplazado desde los tres hospitales donde realizan prácticas: el Príncipe de Asturias (en Alcalá de Henares), el Provincial de Guadalajara y el Ramón y Cajal, en Madrid. Los miembros de la delegación de alumnos, convocantes de esta concentración, esperaban al grueso de sus compañeros pasada la medianoche.

La delegación ha querido demostrar la seriedad de su protesta: "Normalmente, cuando hay una huelga de estudiantes la gente piensa que lo que queremos es no dar clases, así verán que somos responsables", explicó Luis Felipe González, miembro de la delegación y promotor de esta idea. La consigna era "Si no quieres estudiar, no vengas".

Estos representantes se han sumado a la convocatoria de huelga y manifestación de hoy. Los delegados explicaron a los profesores que no tomaban esta decisión en nombre de todos. Así que hoy habrá clase para quien quiera asistir.

Música y bocadillos

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Un cartel en el que un Aladino universitario frota la la para y el genio le contesta -"Te he dicho deseos, no milagros, soy un genio, no un ministro"- junto a otros en el mismo tono humorístico, calentaban el ambiente colgados en las puertas de la biblioteca, informa Arantxa García de Sola.

Mientras, alrededor de 300 estudiantes se enclaustraban en la Facultad de Sociología y Ciencias Políticas y otro centenar en la de Matemáticas, ambas de la Universidad Complutense, adonde acudieron cargados con comida, bebida, guitarras y sacos de dormir para hacer más corta la espera de la jornada de movilizaciones. El ambiente en esta facultad era, sobre todo, festivo. De las guitarras salían las notas de canciones de los Beatles, Pink Floyd y otros grupos de los años sesenta, informa Antonio Jiménez.

Entre bocados a la tortilla, los estudiantes expresaban su temor a que grupos de ultraderecha intenten hoy reventar la manifestación. A las cinco de la tarde ya había gente en Sociología preparando la marcha de protesta. Los estudiantes han organizado un servicio de seguridad. "Pero sin exageración. Sólo para llevar bien visible la pancarta y para controlar las provocaciones. Ya habrá bastante policía para garantizar el orden", decía uno de los organizadores. La pancarta que portarán estos alumnos de Sociología dirá escuetamente: "Por una universidad pública".

Sin embargo, los estudiantes no olvidaban el motivo que les había reunido allí: "La razón son las tasas. Es lógico. Para movilizar ahora a la gente hay que buscar una causa económica. Pero eso no es todo. Ahí están la mas¡ficación, los nuevos planes de estudio, etcétera", decía Rafa, otro estudiante de la Facultad de Sociología.

Mientras, los estudiantes de la Autónoma exigían que la manifestación contra las tasas fuese tranquila: "Queremos dejar claro que exigimos que todos los que se manifiesten lo hagan de forma pacífica", apuntaba Alfonso Hernanz, miembro de la asociación de estudiantes de Derecho de esta universidad. "No queremos cojos Manteca en la manifestación" decía Laura Villalba, también de la asociación. En su mente estaban los últimos actos violentos ocurridos en la Complutense. "No creo que lo que ha ocurrido allí esté respaldado por las asociaciones de estudiantes ni por el movimiento contra las tasas", afiadía esta estudiante.

Previsión de asistencia

Representantes de las distintas asociaciones de la Autónoma estimaban que asistirán a la manifestación de hoy entre 5.000 y 15.000 alumnos. Quienes acudirán seguro a protestar por el aumento de tasas y para exigir una facultad propia en el próximo curso, son los estudiantes de Magisterio de la Escuela Santa María de la Autónoma. Los alumnos de esta escuela han aceptado la oferta del vicerrector de estudiantes de la Autónoma, Eugenio Hernández: el primer curso estudiará este año en unos barracones de Cantoblanco y los de segundo y tercero se quedarán en os pabellones de la escuela.

El curso en la Escuela Santa María quedó interrumpido el pasado día 15 y se reanudará el próximo jueves para los alumnos de segundo y tercer curso; y el 2 de noviembre, para los de primero, informa Paz Álvarez.

Los estudiantes de Humanidades de la Universidad Carlos III decidieron ayer unirse a las protestas de hoy, informa Víctor Saornil. La cámara de estudiantes tomó esta decisión tras consultar a los representantes de todas las titulaciones que se Imparten en Getafe. "La gente está mayoritariámente en contra de la subida", aseguró un miembro de la cámara de estudiantes.

El sistema de créditos puesto en marcha en la Universidad Carlos III eleva a cerca de 100.000 pesetas el coste de la matriculación en las titulaciones del campus de Humanidades, según la cámara de estudiantes. "En Derecho, que tiene un nivel 7 de experimentación, cuesta 930 pesetas cada crédito en primera matriculación; y entre 1.350 y 1.500 en segunda matriculación. Ese precio hay que multiplicarlo por seis o siete créditos que tiene cada asignatura y cuyo coste final es entre 8.000 y 10.000 pesetas", expone un representante estudiantil.

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