El 'grupo de Las Navas' pide a Alfonso Guerra que contribuya a pacificar el conflicto en el PSOE
El grupo de Las Navas pidió ayer al vicesecretario general del PSOE, Alfonso Guerra, que utilice su influencia para pacificar la situación interna. En una reunión que mantuvieron en la sede central del PSOE en Madrid los miembros del grupo renovador exhortaron a Guerra a que expusiera sin tapujos su posición sobre los conflictos del partido. Los renovadores dieron a la reunión con Guerra el mismo tratamiento que a la mantenida con Felipe González la semana anterior, aunque en ésta pusieron el acento en la necesidad de buscar la aproximación entre los dos principales dirigentes socialistas.
Alfonso. Guerra se mostró ayer "receptivo" a las reflexiones que le trasladaron los miembros del grupo de las Navas tras más de cuatro horas de reunión. Estas reflexiones tienen que ver con lo que consideran imprescindibles cambios en la estructura del partido, en las cuestiones ideológicas y en propuestas que el PSOE debe dar a los problemas de la sociedad. Paulino Barrabés y Nicolás Redondo Terreros insistieron al término de la reunión en que las preocupaciones que transmitieron a Guerra son las mismas que hicieron llegar a Felipe González.Este grupo quiso ayer dejar muy claro que no se adscribe ni en la corriente guerrista ni en la renovadora, aunque cada uno de ellos de manera individual pueda estar más cercano a una u otra. Según Redondo Terreros, la afinidad que les mantiene unidos es la de compartir un determinado talante que huye de las "descalificaciones". Este grupo pidió a Guerra que contribuya a zanjar el debate personalista que reina en el PSOE al considerar que resulta poco edificante para la sociedad.
Felipe González había dado luz verde al grupo para entrevistarse con Guerra. La representación quedó sensiblemente mermada por la incomparecencia de dos ministros -Javier Solana, de Exteriores, y Jerónimo Saavedra, de Administraciones Públicas-, así como por la del primer secretario del PSC, Raimon Obiols; el presidente de la Comunidad Valenciana, Joan Lerma, y el diputado Luis Yáñez.Paulino Barrabés, convocante de las reuniones del grupo, señaló ayer que toda interpretación negativa respecto a estas ausencias constituiría una falsedad, pues las ausencias estaban justificadas. Obiols se encontraba en Italia, Luis Yáñez recibía a esa hora una condecoración en la embajada de Chile, Javier Solana celebraba una reunión de trabajo preparatoria de la cumbre del GATT del lunes en Bruselas, Joan Lerma tenía una reunión de Gobierno en su comunidad, y Jerónimo Saavedra asistía en nombre del presidente del Gobierno a la toma de posesión del nuevo presidente de Aragón, José Marco.
Bases de entendimiento
Nicolás Redondo Terreros, secretario provincial del PSOE de Vizcaya y miembro del grupo, manifestó a este diario que el grupo va a trabajar "para echar las bases del entendimiento dentro del PSOE". A juicio del dirigente socialista, la reunión se planteaba en un clima favorable por la consecución de una lista consensuada ante el congreso socialista de Sevilla, que enfrenta a guerristas y renovadores, así como por el. encuentro de la víspera en La Moncloa entre Felipe González y Txiki Benegas, preparatorio del congreso federal.
En la misma línea de Redondo Terreros se situó otro de los componentes del grupo, el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves. Éste manifestó: "Vamos a sondear las posibilidades de entendimiento en el partido y a poner las bases para ello". Los términos del debate interno se han enrevesado al constatar los dirigentes socialistas la existencia de "incompatibilidad" entre Felipe González y Alfonso Guerra, acrecentada por las críticas de éste al Gobierno. Este clima se ha suavizado esta semana, tras las matizaciones de Guerra y la voluntad expresa de González de seguir jugando a la integración dentro del partido.
De todos modos, el secretario general del PSOE ha adelantado que en el próximo congreso socialista elegirá la dirección del partido con plena libertad frente a los condicionamientos de etapas anteriores.
Jornadas de debate
Este grupo, un tanto heterogéneo, dijo hace una semana a González y ayer a Guerra que el enfrentamiento de ambos repercutía muy negativamente en la organización y tenía consecuencias sociales graves, dado que el PSOE es el partido en el Gobierno. Asimismo encontraron en González la voluntad de pacificar el ambiente y se mostraron seguros de que la acogida de Guerra iba a ser favorable.
El dirigente del socialismo vizcaíno apuesta por una vía de entendimiento desde las bases del PSOE y ayer hizo pública la participación de los principales protagonistas del debate interno en unas jornadas que se celebrarán en Bilbao los días 1, 2 y 3 de octubre. Además de la invitación cursada a González y Guerra, han confirmado su asistencia el presidente del grupo parlamentario, Carlos Solchaga; el ministro del Interior, José Luis Corcuera; el ministro de la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba; el primer secretario del PSC, Raimon Obiols; el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves; el secretario de organización, Txiki Benegas; el ex ministro Joaquín Almunia y el dirigente de Izquierda Socialista Manuel de la Rocha.
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