González frena la ira de Rodríguez Ibarra

El jefe del Gobierno, Felipe González, frenó ayer la ira del presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, al convencerle de que la fórmulapropuesta por Hacienda para ceder la gestión de un 15% del IRPF a las comunidades autónomas garantiza la neutralidad entre las regiones ricas y pobres. González, a petición de Ibarra, recibiópor la tarde al díscolo presidente extremeño, que se ha manifestado como el gobernante autonómico más ante contra esa cesión. Por la mañana, el consejero de Economía de Extremadura, ManuelAmigo, y el vicepresidente regional, Ramón Ropero, habían reabierto la polémica al anunciar su "rechazo" a la fórmula por "insolidaria" y por "vulnerar la Constitución y el Estatuto de Autonomía".

Felipe González, al que acompañó el vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, consiguió ayer convencer a Rodríguez Ibarra, en última instancia y tras casi tres horas de reunión, de la conveniencia de aceptar la fórmula de cesión del IRPF garantizándole que su aplicación no ahondaría en la división entre comunidades autónomas ricas y pobres, como viene denunciando desde hace dos años el presidente extremeño. González ya se había pronunciado públicamente, este fin de semana, sobre la bondad de la fórmula propuesta por Hacienda y necesitaba zanjar la discusión con el presidente extremeño porque la cesión del 15% el IRPF se va a incluir en los Presupuestos del Estado, cuya negociación reanuda hoy el Gobierno con los nacionalistas catalanes, y que se presentarán al Parlamento antes de fin de mes.Rodríguez Ibarra hizo un auténtico encaje de bolillos para tratar de justificar su cambio de opinión y salvar la cara de sus colaboradores -el vicepresidente y el consejero de Economía extremeños- que por la mañana habían rechazado, de forma tajante, la fórmula presentada por Hacienda. Estos, tras entrevistarse con el secretario de Estado de Hacienda, Enrique Martínez Robles, habían manifestado que "Extremadura llegará hasta el final porque [la propuesta] vulnera la Constitución, el pacto de autonómico de enero de 1992 y el Estatuto de Extremadura", y argumentaron que "la cesión es insolidaria y disparará las diferencias entre los territorios".Documento inéditoEl presidente extremeño salió al paso asegurando, tras su entrevista con el jefe de Gobierno ocho horas después, que González le había presentado un documento inédito que explica la aplicación de la fórmula, presentada por Hacienda, y en el que se garantiza la neutralidad entre regiones ricas y pobres.

Según afirmó Rodríguez Ibarra, la aplicación de la fórmula implicaría una desviación inferior al uno por mil entre lo que recibirían unas regiones y otras: "El que más gana, gana 80 millones y el que menos, 40 millones, en cálculos mensuales. En el caso de Extremadura, la desviación sería de 40 millones". "Si es así, tal y como me ha asegurado el presidente del Gobierno, estaría mucho más tranquilo al respecto. De lo contrario, me opondría al sistema", afirmó Ibarra con su característico tono rotundo. Un tono del que hizo gala en todo momento como actitud política: "Le he dicho al presidente del Gobierno al comenzar la entrevista que a mí me pagan por defender los intereses de Extremadura y no los de España".

El presidente extremeño argumentó las causas de la neutralidad en la aplicación del impuesto que explicaban su cambio de posición: "Antes se planteaba una participación del 15% sobre la media nacional de toda España Ahora se calcula sobre la recaudación que el Estado hace en cada región. Es un avance respecto a hace unos meses y una nueva propuesta en un tema en el que ha habido por lo menos cuatro".Preguntado Rodríguez Ibarra cómo explicaba que él aceptara la misma fórmula que sólo ocho horas antes el vicepresidente y el consejero de Economía de su comunidad habían rechazado, contestó sin inmutarse: "El vicepresidente y el consejero de Economía han visto la fórmula y yo su aplicación. Con la fórmula sólo no queda claro que la participa ción del 15% se hace sobre la re caudación en cada comunidad". Preguntado, a continuación, cómo era posible que Hacienda explicara en su ronda con los consejeros autonómicos la fórmula y no su aplicación, respondió: "Hay dos rondas. En la primera, que se está celebrando es tos días, se explica la fórmula. Y en la segunda, su aplicación".El presidente extremeño aconsejó, a continuación, la distribución del documento inédito de aplicación de la fórmula y solicitó al jefe de Gobierno que se avance hacia el objetivo de la nivelación de servicios mínimos entre las autonomías.También aseguró que la aplicación de la fórmula no dejaba fuera del sistema a ninguna comunidad porque "ninguna alcanzaría con el 15% del IRPF su participación en los ingresos del Estado". Aseguró, asimismo, que Felipe González le había garantizado que "si a los dos años se comprueba que el sistema genera desviaciones grandes, habría que estudiarlo".

La cumbre autonómica, solicitada por Rodríguez Ibarra días atrás para abordar entre los presidente de las comunidades su idea de configuración de España, ocupó otro apartado en su reunión con Felipe González. Éste la rechazó y le indicó que si en el Senado se termina por constituir la Comisión General de Autonomías será ése el marco adecuado.Por su parte, el representante de la Comunidad de Cantabria aseguró tras su encuentro en Hacienda que su autonomía, en contra de lo afirmado la pasada semana, no quedará excluida. Agregó que antes del próximo día 20 se transferirán competencias para evitar esa exclusión.

El presidente balear, Gabriel Cañellas, del PP, aseguró ayer que la exclusión temporal de las islas de la cesión del 15% "es políticamente inaceptable" y señaló que el modelo de cesión "es injusto y discriminatorio".

Navarra y País Vasco no entran en la cesión del IRPF porque tienen de hecho autonomía fiscal. Pero el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, no ha sido ajeno a la polémica. En declaraciones a la Cope, Arzalluz afirmó que Andalucía y Extremadura viven por encima de lo que fiscalmente producen. "Se le llama solidaridad cuando ayuda a desarrollarse, pero se llama egoísmo cuando lo que se quiere es vivir a costa de otros".