Israel y la OLP pactan una autonomía limitada en todos los territorios ocupados
Israel y la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) han llegado a un acuerdo histórico que no sólo puede acabar con la Intifada, sino que abre paso a la solución definitiva de un conflicto que arranca de la creación del Estado judío, en 1948, y, más específicamente, de la Guerra de los Seis Días, de junio de 1967. Hoy, o todo lo más mañana, según el primer ministro israelí, Isaac Rabin, se firmará en Washington un compromiso que permitirá la autonomía plena inmediata de la franja de Gaza y la ciudad de Jericó y una autonomía limitada para el resto de la Cisjordania ocupada.
La diplomacia silenciosa israelo-palestina, rematada con 14 reuniones celebradas a lo largo del pasado año en Noruega, ha logrado el milagro de desbloquear un proceso que durante 10 rondas de negociación había defraudado las expectativas suscitadas por la conferencia de Madrid hace 22 meses.Las filtraciones producidas ayer apuntan a que los palestinos ejercerán de forma casi inmediata en Gaza y Jericó la mayor parte de las funciones de la Administración militar israelí, incluidas la seguridad interior y la policía. En el resto de Cisjordania habrá una autonomía limitada, con control palestino de áreas como sanidad y educación, como embrión de un autogobierno pleno en los territorios ocupados. El Ejército israelí efectuará un nuevo despliegue para vigilar la frontera y proteger a los colonos.
El Gobierno de Isaac Rabin respaldó anoche el plan. Sólo dos ministros se abstuvieron, el de Interior y dirigente del ultraortodoxo partido Shaas, Arie Deri, y el de Economía, el laborista Simón Setreet. Los 16 ministros restantes aprobaron el proyecto, al que ya había dado su visto bueno el Comité Ejecutivo de la OLP y que cuenta también con el respaldo de Estados Unidos y Rusia, copatrocinadores de la conferencia de paz. Según algunas fuentes, el compromiso se anunciará hoy mismo en Washington, apenas se inicie la undécima ronda negociadora.
Parece que será la OLP la que firme el acuerdo por parte palestina, lo que supondrá un reconocimiento oficial del que ya disfruta de hecho. Yasir Arafat fue objeto ayer de la furia de los radicales palestinos, uno de los cuales, Ahmed Jibril, llegó a vaticinar su muerte. También el grupo de Georges Habache y los integristas de Hamás se oponen a todo compromiso con Israel. En el Estado hebreo, las críticas llegan de los derechistas del Likud y de los colonos en los territorios ocupados.
Página 3 Editorial en la página 8
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- OLP
- Franja Gaza
- Cisjordania
- Primera intifada
- Conferencias internacionales
- Política exterior
- Territorios palestinos
- Conferencia paz
- Israel
- Oriente próximo
- Geopolítica
- Conflicto árabe-israelí
- Negociaciones paz
- Asia
- Organizaciones internacionales
- Proceso paz
- Relaciones internacionales
- Relaciones exteriores
- Conflictos
- Política