Las obras de construcción de la M-40 llegan a las puertas del monte de El Pardo

Ya llegan las máquinas al monte de El Pardo. De momento, un solitario tractor ha rasurado dos hectáreas -como unos dos campos de fútbol- de monte bajo y matorral para abrir paso al tramo de la M-40 que va desde la carretera de Colmenar hasta la de El Pardo. Aunque el desmonte se ha efectuado dentro de los límites de la tapia del bosque, se trata de una zona con escaso valor ecológico. El tramo más polémico de la M-40, que enfrentó al Ministe rio de Obras Públicas con la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid, discurrirá al otro lado de¡ río Manzanares. Precisamente es el único que aún falta por contratar para cerrar el cuarto anillo de circunvalación de la capital.

Los trabajadores de la empresa forestal José Fraile Bermejo, de Valsaín (Segovia), estaban ayer sorprendidos por la expectación que ha despertado en Madrid su rutinario trabajo de desmonte, al que apenas han dedicado un par de semanas. "Aquí hace mucho calor, así que por hoy vamos a parar", explicaba un capataz a bordo de una furgoneta todoterreno.Su misión consiste en despejar el terreno para que las excavadoras de la compañía constructora Auxini, contratista del tramo de la M-40 desde la autovía de Colmenar al enlace de la Zarzuela, abran la boca de un túnel que tendrá su salida en la zona de Fuentelarreina, ya fuera del monte de El Pardo. "Esta parte del monte se quemó hace 20 años y no tiene mayor valor forestal, explicaba el capataz de la empresa que ha ejecutado el desmonte.

Casi nadie se había preocupado por este pago de Fuentelarreina hasta que se presentó un tractor y levantó una polvareda. Las obras han salvaguardado a una veintena de encinas que deberán ser trasplantadas lejos del surco de asfalto de la autovía. Este tramo de la M-40 -poco más de siete kilómetros que discurren por el norte del distrito de Fuencarral y que tocan la tapia del monte de El Pardo en sus últimos metros- cuenta con un presupuesto de 13.500 millones de pesetas.

A partir del enlace de la Zarzuela, una compleja trama de túneles artificiales y viaductos, discurre el trazado más polémico del cierre norte de la M-40, hasta el nudo de El Barrial (en la carretera de La Coruña). Sus 3,5 kilómetros saldrán caros: un total de 8.827 millones de pesetas.

Túnel artificial

Este último tramo, aún pendiente de ser sometido al trámite de información pública, discurre por el exterior de la tapia del monte de El Pardo hasta la lengüeta de bosque que se aproxima al hipódromo de la Zarzuela, en el arroyo de Valdemarín. En ese punto será necesario construir un túnel artificial de unos 320 metros de longitud, que después será recubierto con un manto vegetal que reproducirá el estado original de la vaguada.Tras el túnel -que pasará bajo la carretera de la Playa y una pista del hipódromo de la Zarzuela- un viaducto cruzará el río Manzanares y enlazará con la zona de Fuentelarreina, donde precisamente se han acometido los trabajos de deforestación.

El Ministerio de Obras Públicas, la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid suscribieron un acuerdo el 15 de julio de 1992 para completar la quinta ronda en su punto más cercano al monte del El Pardo. Al final, la expropiación de unos chalés en la avenida de Valdemarín fue la solución pactada para desbloquear un conflicto que enfrentó a las tres administraciones. Y que estuvo a punto de romper el pacto entre el PSOE e Izquierda Unida en la Comunidad de Madrid.

En una gran parte, la calzada del cierre norte de la M-40 discurrirá deprimida respecto al terreno, para reducir su impacto ambiental en la zona verde y en las urbanizaciones situadas en sus inmediaciones. Además, la nueva autovía contará con 2,8 kilómetros de pantallas acústicas. El Ministerio de Obras Públicas ha proyectado también la reforestación de los terrenos afectados por los desmontes y la construcción de balsas de decantación, de manera que los vertidos accidentales que se puedan producir no lleguen hasta los cauces de agua.

La mitad, en servicio

Las medidas de seguridad del cierre norte de la M-40 también obligarán a instalar barreras para vehículos, un vallado que impida el acceso de los animales de El Pardo a la autovía, cuyas márgenes estarán diseñadas con inclinación para evitar el vuelco de vehículos en caso de accidente.La M-40 -68 kilómetros en total- dispone en la actualidad de 33,5 kilómetros en servicio: los que van desde la carretera de Extremadura (N-V) hasta la de Burgos (N-1), siguiendo el sentido contrario a las agujas del reloj.

Obras Públicas calcula que dotar a Madrid de una cuarta ronda de circunvalación costará unos 70.000 millones de pesetas. Eso será, como pronto, en 1996. Ocho años antes, cuando empezaron los trabajos, el presupuesto no superaba los 30.000 millones.