Guinea acusa al Gobierno español de injerencia en sus asuntos y subversión

Los miembros de la colonia española se han convertido en el nuevo blanco de las maniobras de hostigamiento del régimen ecuatoguineano del presidente Teodoro Obiang. El objetivo, aseguran fuentes diplomáticas españolas y occidentales, es librarse de las presiones españolas para que democratice el país. La detención en Malabo, el domingo, del español Antonio Núñez Torres es el último episodio de este pulso. El sábado, Malabo había acusado a España de injerencia en sus asuntos por propiciar una emisión "subversiva" de Radio Exterior, de España, que ayer faltó a su cita con los oyentes de Guinea.

El pasado 4 de junio, coincidiendo con diversas arengas de Obiang de tinte antiespañol, un miembro de los Jóvenes Antorchas -una guardia pretoriana integrada por adolescentes del entorno tribal del presidente- abrió el fuego ante la embajada española en Malabo. Fuentes diplomáticas aseguran que el disparo fue accidental, pero admiten que "responde al deseo de Malabo de propiciar la confusión y el miedo de los españoles".El pulso hispano-guineano no tiene tregua en los últimos dos meses. A la brutal agresión y violación de una médico española en Sevilla de Niefang, siguió la detención, hace dos semanas, del médico Luis Costart, acusado de ser amigo de un miembro de la oposición. La expulsión de Costart, el pasado sábado, coincidió con un nuevo rapapolvo de las autoridades guineanas al Gobierno español, al que dirigieron una extensa nota de "repulsa y condena" por las emisiones "subversivas" que Radio Exterior de España viene dedicando a Guinea Ecuatorial. Dicha emisora se ha convertido en el único medio de comunicación plural frente a la televisión y radio oficiales -subvencionados por España- que se hallan monopolizados por el régimen.

"La concepción de la emisión Para Guinea Ecuatorial de Radio Exterior: de España, con el pretexto de la democracia, se está transformando en una actuación de intromisión en los asuntos que son de la jurisdicción interna de Guinea Ecuatorial", dice la nota del Gobierno guineano, a la que ha tenido acceso este diario.

La conexión de ETA

Al día siguiente de esta protesta y del nuevo intento del Gobierno guineano de lograr el cierre de esta emisión radiofónica, Antonio Núñez Torres, dueño de una carpintería en el vecino Camerún, fue detenido en Malabo tras haber sido acusado de pertenecer a la organización 'terrorista ETA. Según Malabo, ETA habría estado preparando un atentado contra el presidente Teodoro Obiang con el apoyo de Núñez y sus conexiones con la oposición.Madrid considera "absurdas" tales acusaciones, que también han servido de pretexto para lanzar una nueva ola de represión contra la oposición guineana y anunciar a las autoridades militares la implantación del estado de excepción 20 días antes de la celebración de las elecciones legislativas del 12 de setiembre.

Según fuentes diplomáticas en Madrid, estos nuevos episodios también constituyen una respuesta al Gobierno de Felipe González al que Obiang prometió, hace ya dos años, un proceso electoral justo y libre. Según estas fuentes, un punto clave para contrarrestar el desafío de Obiang será la eliminación de las divergencias que el pasado invierno llegaron a enfrentar al Ministerio de Asuntos Exteriores, español y el palacio de la Moncloa. Se trata de optar entre la tesis que considera prioritario evitar conflictos con Malabo, aunque ello suponga la salida definitiva de la ex colonia, y la de quienes creen necesario mantener una actitud beligerante frente a Obiang.

La tensión que rodea el proceso guineano es tal que la no emisión, ayer, del programa Para Guinea Ecuatorial, fue interpretada por los círculos de oposición como una peligrosa claudicación española ante el régimen. Portavoces de la Oficina de Información Diplomática aseguraron desconocer la causa de la no emisión del programa. Tampoco fue posible obtener la versión de los hechos por parte de Radio Exterior.