El teléfono cuesta 10 veces más en los pueblos que lindan con el área urbana

Vivir al otro lado de la línea divisoria que delimita la frontera del área metropolitana de Madrid supone que la factura del teléfono se multiplique por 10.El alcalde de Villanueva del Pardillo (2.136 habitantes, a 28 kilómetros al noroeste de Madrid), Juan González Miramón (PP), asegura estar dispuesto a dar la batalla para que las tasas se revisen y acabar así con la discriminación de los abonados fronterizos.

Este municipio recoge el relevo en la lucha contra Telefónica que mantuvo durante el pasado invierno el Ayuntamiento de Tres Cantos (15.557 vecinos, a unos 15 kilómetros al norte de la capital). González Miramón ha convocado a las localidades que lindan con el área metropolitana para conseguir el "mismo tratamiento" que da la compañía a sus vecinos urbanos. Como primer paso, ha pedido la intervención de la Junta Superior de Precios para que abra un expediente a Telefónica por la discriminación que dicen sufrir por el pago abusivo" de tarifas.

En el noroeste de la región sólo Pozuelo de Alarcón (49.433 habitantes), Boadilla del Monte (16.069), Majadahonda (33.944) y Las Rozas (35.644) pertenecen al área metropolitana y se benefician de las mismas tarifas que rigen en la capital: 10,03 pesetas por una llamada de un minuto, siempre que se efectúe entre las ocho de la mañana y las diez de la noche, de lunes a viernes y dentro del área urbana.

50 pesetas por minuto

Sin embargo, los vecinos de los municipios de Galapagar (9.279 habitantes), Torrelodones (7.226), Villanueva de la Cañada (4.686), Hoyo de Manzanares (3.518), Valdemorillo (2.826), Brunete (2.543), Colmenarejo (2.397), Villanueva del Pardillo (2.136) y Sevilla la Nueva (1.691) tienen que pagar para acceder al área metropolitana o a otros puntos de la región 50 pesetas por un minuto si la llamada se produce entre las ocho de la mañana y las cinco de la tarde.Además, en el área metropolitana se mantienen los tres primeros minutos al precio de 10,03 pesetas, mientras que, en el resto de la provincia suben progresivamente y un minuto cuesta 50 pesetas; dos, 80, y tres, 110.

La mayor parte de las llamadas de los abonados fronterizos van dirigidas a la capital, donde se concentran sus lazos laborales, familiares, de estudios y de servicios.

El Ayuntamiento de Villanueva del Pardillo no duda en comparar estas tarifas con las aplicadas por los servicios del 903 (con recargo).

La comarca ha experimentado en el último decenio un fuerte incremento de habitantes, que se multiplican por cinco durante los meses de verano.

"Una factura de 8.000. pesetas en Majadahonda asciende a 40.000 si las mismas llamadas se hacen desde Villanueva del Pardillo", critica un responsable municipal.