El órgano rector de la bolsa italiana cree falsas las cuentas de Ferruzzi

Enzo Berlanda, presidente de la Consob, el organismo regulador de la bolsa italiana, presentó el pasado miércoles una denuncia judicial contra todos los consejeros de Ferruzzi Financiaria (Ferfin) y de su participada, la compañía Montedison, por presunta falsedad de los balances que fueron aprobados a finales del mes de junio, en las respectivas juntas de accionistas de las sociedades mencionadas.

La noticia, que provocó ayer una fuerte caída en la bolsa de los títulos de las empresas afectadas, coincidió, además, en el tiempo con la confirmación de la detención en Ginebra de Giuseppe Garofanto, presidente de Montedison y consejero delegado de Ferfin hasta el pasado mes de diciembre y fugitivo de la justicia desde enero, por el presunto pago de una comisión de 250 millones de liras (unos 22 millones de pesetas) a la Democracia Cristiana. [Un portavoz del ministerio de Justicia suizo aseguró ayer que Garofano será extradido inmediatamente a Italia.]Dado que estuvo en el grupo hasta finales del último ejercicio, Garofano es además, junto al también ex presidente Arturo Ferruzzi, a su cuñado Carlos Sama, al financiero francés Jean Marc Vernés o a Sergio Cragnotti, el ejecutivo ligado a Raúl Gardini -por citar algunos consejeros de Ferfin hasta hace dos semanas-, uno de los responsables potenciales de las irregularidades contables denunciadas.

Interrogatorio

Prueba de ello, es que el magistrado Francesco Greco, responsable de las investigaciones penales sobre Montedison en la audiencia de Milán, interrogó ayer a Garofano en Ginebra. Con Greco, se desplazó hasta el penal de la capital suiza Antonio Di Pietro, magistrado de la investigación denominada Manos Limpias sobre el pago de comisiones a políticos.La única noticia que se filtró de estos interrogatorios es que, al parecer, Garofano no se oponía a regresar de inmediato a Italia. El abogado del empresario ya había anunciado el miércoles que Garofano se encontraba en Suiza precisamente para preparar su entrega a las autoridades judiciales italianas.

El retorno a Italia desde Suiza por extradición ofrece la ventaja de que el extradido sólo podrá ser juzgado por el delito tomado en consideración por las autoridades helvéticas. La financiación ilegal deun partido político no es delito en Suiza.

Sobre la denuncia de Berlanda, no se han dado a conocer detalles. Se trata fundamentalmente de los 320 billones de liras que afloraron como pérdidas de una financiera suiza participada en los balances de Montedison el día de la junta, y que, trasladados a los balances de Ferfin, representaron unta pérdida consolidada de 435 billones de liras.