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Fuertes presiones sobre Izetbegovic para que acepte la división de Bosnia-Herzegovina en tres miniestados

A Bosnia se le acaba el tiempo, según insisten los mediadores internacionales David Owen y Thorvald Stoltenberg. Quieren una pronta respuesta al plan serbio-croata de partición del país en tres miniestados. La presidencia colectiva de Bosnia, con Izetbegovic a la cabeza, parece que rechazará esta opción y se inclinará por la de un Estado federal. La OTAN, por su parte, ya dispone de un plan de acción capaz de proteger la vida de los cascos azules allí desplegados.

Mientras se agita el terreno diplomático, la guerra crea nuevas formas de barbarie. Menos de una hora después de la llegada a Travnik, en Bosnia central, de 250 refugiados musulmanes liberados por los serbios de Banja Luka, la propia artillería serbia, formada por varios carros de combate, abrió fuego contra la escuela que les sirvió de primer refugio. Varios resultaron heridos. "La gente se volvió loca y empezó a correr de un lado a otro", aseguró un testigo.Estos refugiados -niños, mujeres y ancianos- llegaron a Travnik tras a atravesar las líneas del frente. Para cambiar su suerte pagaron a la Cruz Roja serbia 120 marcos (alrededor de 9.500 pesetas) cada uno. Un pequeño negocio humanitario de 2,3 millones de pesetas.

Entretanto, el frente diplomático ha recuperado un cierto protagonismo en las últimas horas. Los mediadores internacionales, David Owen y Thorvald Stoltenberg, se entrevistaron ayer por la noche en Zagreb con el presidente croata, Franjo Tudjman. No trascendió el contenido de la reunión, que versó sobre el plan de partición de Bosnia-Herzegovina en tres miniestados.

El líder rebelde serbio, Radovan Karadzic, amenazó con romper la baraja y proclamar un Estado serbio en las zonas que controla militarmente, es decir, en el 70% de la ex república de Bosnia.

Las Naciones Unidas están convencidas de que Izetbegovic, el resto de su Gobierno están a punto de adoptar una posición común sobre el plan. El portavoz de la ONU en Zagreb, John Mills, aseguró ayer que tenía una "cierta indicación" de cuál sería la actitud final, pero no dio detalles.

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No a la partición

Mirko Pejanovic, uno de los miembros serbios de la presidencia bosnia, aseguró anoche a Reuter que se hallaban muy próximos a alcanzar un acuerdo que incluye el rechazo a la partición de Bosnia en tres Estados. Según Pejanovic, la presidencia colectiva rechazará asimismo el Plan Vance-Owen y el mantenimiento de Bosnia como un solo Estado.

La opción elegida es, al parecer, la de un Estado federal y no confederal como pretenden Milosevic y Tudjman. Pejanovic, que no desveló si hablaba a título personal o como portavoz, adelantó que "en caso de no haber acuerdo propondremos la creación de un protectorado internacional sobre Bosnia".

La Alianza Atlántica comenzará en los próximos días la operación de protección de los cascos azules, en la que participarán aviones franceses, holandeses, británicos y norteamericanos. El Consejo de la OTAN adoptó ayer los planes definitivos de la operación, que ahora serán transmitidos a la ONU.

Los combates siguen su propia dinámica. Novi Travnik, Gorni Vakuf y Fojnica, en Bosnia central, sufrieron ayer un fuerte ataque artillero. Según el Consejo de Defensa Croata (HVO), sus fuerzas han hecho más de 2.000 prisioneros en la batalla de Maglaj.

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