La partición de Bosnia en tres se discute en Ginebra pueblo a pueblo

El mapa de una Bosnia partida en tres Estados étnicamente puros se discutía ayer en Ginebra, pueblo a pueblo, entre los líderes de todas las partes implicadas, excepto el jefe de Estado de la moribunda república, el musulmán Alia Izetbegovic, traicionado por la presidencia colectiva. Los mediadores internacionales Thorvald Stoltenberg y David Owon ejercían de notarios de una operación dirigida a poner sobre el papel lo que las armas imponen en el campo de batalla.

Estaban casi todos: los presidentes de Serbia (Slobodan Milosevic) y Croacia (Franjo Tudjman); varios miembros de la presidencia bosnia, encabezados por el croata Franjo Boras, y los líderes de croatas y serbios de Bosnia, Mate Boban y Radovan Karadzic, respectivamente. Sólo faltaba Izetbegovic, que declaraba en la asediada Sarajevo: "No hay nada que discutir".Karadzic se presentó bajo el disfraz de la generosidad y ofreció devolver a los musulmanes 4.000 kilómetros cuadrados de tierra conquistada, con lo que esta comunidad conservaría "más del 50% de la riqueza" y el 30% del territorio. Los serbios tienen ahora el control del 70% de Bosnia. Karadzic quiere "tres Estados separados", aunque aceptaría una confederación (con atribuciones mínimas de la Administración central) "si la comunidad internacional lo prefiere". Páginas 2 y 3