González aceptó los errores del PSOE en política autonómica, según Pujol

La propuesta de que Convergéncia i Unió (CIU) entre en un Gobierno de coalición, formulada por Felipe González a Jordi Pujol en la entrevista del jueves, no es aceptada de momento por el presidente de la Generalitat. Tras la reunión, las posiciones de fondo de Pujol no han cambiado, según dejó claro ayer en conversaciones con dirigentes de CIU. Sí se mostró satisfecho del desarrollo de la entrevista y de la actitud de González, quien aceptó que, en ocasiones, la política autonómica del PSOE había sido errónea.

La opinión de Pujol no era compartida por la totalidad del partido, y el silencio del secretario general de Convergéncia, Miquel Roca, sobre un pacto con el PSOE cabe interpretarlo como una cautela desde la total discrepancia con las posiciones de la mayoría.En sus conversaciones con los dirigentes de CiU, Pujol les pidió tranquilidad y les aseguré que el tablero político sigue siendo el que antes de la entrevista con González. Buena parte de la reunión estuvo destinada a hablar de Europa, cuestión que despierta un interés. recíproco. De la entrevista, Pujol sacó la impresión de que había voluntad de alcanzar un acuerdo por parte del presidente en funciones y de que éste había preparado la reunión para convencerle de la bondad de un pacto. Pujol, que ayer recibió al presidente canario Manuel Hermoso, agradeció a González la actitud sincera con la que le habló sobre cuestiones autonómicas. Dirigentes de CDC afirman que González se mostró comprensivo ante los recelos de formar un Gobierno de coalición que le expresó Pujol y llegó a aceptar incluso que por parte del PSOE se habían cometido errores en materia autonómica. Esta actitud fue entendida por Pujol como un reconocimiento a las reivindicaciones de CiU en los últimos años. Sin embargo, Pujol discrepó cuando González completó su reconocimiento de los errores añadiendo que para evitar que éstos sigan produciéndose, "el catalanismo debe estar integrado en el Gobierno". González no dio explicaciones sobre cuántas carteras estaba dispuesto a ofrecer.

Josep Antoni Duran Lleida, presidente del comité de Gobierno de Unió Democrática -socio electoral de Convergéncia-, señaló ayer que su partido también estudiará a fondo la oferta de González. La posición inicial de los democristianos de Unió es la misma que la que ha expresado una parte importante de dirigentes de CDC: la estabilidad no sólo se garantiza desde el Gobierno, sino también desde el Parlamento, y esta segunda vía es la que se debe explorar. El consejo nacional de UDC, que se reunirá hoy, explorará las diferentes posibilidades de acuerdos partiendo de la base de que se trata de intentar sacar a España de la crisis, "no de ayudar a González y al PSOE". Unió ha tenido información de la entrevista a través del propio Pujol. Sin discutir la autoridad política del presidente de CDC, la voluntad es que en próximos encuentros con González Unió tenga voz propia.

Medios de CDC conceden especial trascendencia a la reunión del comité ejecutivo que se celebrará el lunes y a la que llevará a cabo, 24 horas después, el comité de enlace de la coalición CiU. De mantenerse la postura de Pujol, "pueden saltar chispas", según un dirigente de CDC alineado con las tesis de Pujol.

[Pujol exhortó ayer a los partidos a no especular ni sacar deducciones "quizás interesadas para intentar forzar posturas". En declaraciones a TV-3 calificó la oferta de "difícil y arriesgada" e insistió en que la obligación de CiU es estudiarla. Josep Curto (PP) atribuyó ayer las reticencias de Unió a una coalición a las presiones de la Unión Europea Demócrata-Cristiana, de la que también forman parte los populares].