Primer movimiento en Francia a favor de la despenalización del consumo de droga

Una treintena de médicos, abogados y escritores ha comenzado una larga batalla para intentar romper el berroqueño consenso existente en Francia sobre la imposibilidad de despenalizar el consumo de drogas. El Movimiento de Legalización Controlada de los Estupefacientes (MLC) es la primera organización que predica en este país el fin de la prohibición. Su principal argumento es que "el tráfico ilegal produce efectos devastadores en los planos económico, social, jurídico y sanitario".Durante la larga década en que fueron la principal fuerza política del país, los socialistas franceses adoptaron, en materia de estupefacientes, la misma política que la derecha. En resumen, nada de despenalizar el consumo de drogas, ni siquiera las blandas, y nada de facilitar a los heroinómanos metadona u otros productos de sustitución en centros sanitarios públicos.

Francia, de hecho, es el país más duro de la Comunidad Europea en este sentido. Una de las razones por las cuales el actual Gobierno de centro-derecha se opone a la entrada en vigor de los acuerdos de Schengen sobre libre circulación de personas es el temor a que la droga entre en Francia desde Holanda, España o Italia. Presidido por el jurista Francis Caballero, el MLC afirma que la prohibición es la principal causa de "la fuerza creciente de las mafias del narcotráfico, el aumento de la criminalidad protagonizada por los adictos, la multiplicación de muertes por sobredosis y la infección de sida de los heroinómanos".

El MLC propone, a corto plazo, la despenalización del consumo del cannabis y sus derivados, y a largo plazo, la distribución de todas las sustancias estupefacientes por un monopolio estatal.