Espera en Haití

El presidente electo de Haití, Jean-Bertrand Aristide, peca, sin duda, de exceso de optimismo cuando piensa regresar a Puerto Príncipe, de donde fue expulsado por los militares en 1991. Pero nuevos elementos hacen pensar que la crisis puede salir de un estancamiento de 20 meses. (...) La ONU ha lanzado un ultimátum al régimen de Puerto Príncipe, que ha usado y abusado en los últimos meses de todas las maniobras dilatorias: si en ocho días los golpistas no han firmado (...) un acuerdo para restablecer el Gobierno legítimo entrará en vigor un embargo mundial. (...) Viendo lo que se avecinaba, los militares y los partidos que les apoyan habían aceptado, justo antes del voto del Consejo, la restauración del presidente Aristide, con la condición de que se comprometa a renunciar a la violencia y que acepte mantener a uno de los cerebros del golpe, el general Cédras, en el puesto de comandante en jefe del Ejército.Presentada como un instrumento para conseguir al fin una solución negociada, la resolución del Consejo de Seguridad pesará como una espada de Damocles sobre los parlamentarios antes de reunir a las principales fuerzas políticas haitianas en Nueva York. Por su parte, Aristide (...) ha aceptado que los golpistas se vayan al extranjero. (...) En todo caso, es necesario esperar que esta presión de la ONU produzca inmediatamente sus efectos para poner fin a los sufrimientos de un pueblo que es la víctima de una trágica fatalidad. 17 de junio