Alguien dispara contra cuatro jóvenes que escuchaban música en el coche de madrugada

Cuatro vecinos de Leganés fueron tiroteados por un desconocido mientras escuchaban música a gran volumen y bebían alcohol junto a su coche en un parque de Fuenlabrada (136.000 habitantes) el sábado. Dos de los individuos fueron alcanzados en la pierna y en el hombro por balines del calibre 22, disparados, según las primeras pesquisas, de un punto situado a 20 metros de altura. Por el momento, la policía, no ha localizado el lugar de los hechos, ya que los jóvenes han confesado que iban tan bebidos que no recuerdan el sitió donde recibieron los disparos.Los agentes que investigan el caso están bastante desconcertados con las declaraciones confusas que han efectuado las víctimas de este tiroteo. Éstas aseguran que se perdieron en Fuenlabrada mientras buscaban la discoteca Alien, hacia las cinco de la madrugada del pasado sábado. Más tarde decidieron parar el coche, un Alfa Romeo, junto a un parque para escuchar música y beber algo. Según su testimonio, a los diez minutos de detenerse recibieron cinco disparos. Uno se perdió, dos dieron en el coche, otro impactó en el hombro de José Antonio S. P., de 20 años, y el último fue a parar a la pierna de Miguel Ángel L. V., de 21 años, que estaba en ese momento fuera del vehículo.

Tras el tiroteo, los jóvenes se trasladaron rápidamente al hospital Severo Ochoa de Leganés, donde fueron atendidos. El mismo día fueron dados de alta con un pronóstico de heridas leves, gracias a que los balines eran de bajo calibre.

En las declaraciones recogidas en la comisaría los cuatro individuos no han dado datos precisos del lugar donde pararon. "Hablan de la calle Leganés, y de bancos de piedra", añade uno de los portavoces policiales. Ni siquiera los afectados reconocieron el sitio donde estuvieron en Fuenlabrada, tras rastrear todas las zonas verdes en compañía de dos coches patrulla.

Las dos personas heridas poseen antecedentes penales. En el interior del vehículo la policía descubrió objetos robados que pertenecían a un coche que estaba aparcado el viernes en el instituto de Carabanchel.