Pujol descarta la coalición y propondrá al PSOE un acuerdo amplio sobre economía y autonomías

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujo¡, se muestra dispuesto a alcanzar un amplio pacto con Felipe González en dos grandes áreas: economía y política autonómica. El proyecto de Felipe González de formar un Gobierno de coalición entre socialistas y nacionalistas, por el momento, ha pinchado en hueso por lo que respecta a Convergéncia i Unió (CiU). La estrategia de los nacionalistas catalanes se centra en la consecución de pactos concretos dentro de una negociación permanente con el PSOE en su condición de "aliado preferente". Esta negociación desarrollaría amplios conjuntos de acuerdos por áreas previamente pactados por González y Pujol.

Los socialistas catalanes tampoco dan excesivo crédito a la posibilidad de un Gobierno de coalición PSOE-CiU, aunque sí confían en un acuerdo parlamentario. Con la negociación como telón de fondo, Pujol viaja hoy a Madrid para clausurar un simposio ;sobre nacionalidad y ciudadanía, sin que se conozca si se entrevistará con González.Dirigentes de Convergéncia Democrática (CDC) con los que Pujol ha conversado últimamente entienden que la importancia que el líder nacionalista da a la discusión del programa del futuro Gobierno puede facilitar amplios acuerdos económicos, así como tina mayor afinidad de objetivos en el área industrial. Pujol no está tan seguro de que se puedan alcanzar acuerdos autonómicos, aunque cree que ambos apartados deben avanzar simultáneamente si lo que persigue el PSOE es un acuerdo estable.

El presidente catalán ha adelantado a sus colaboradores que sólo asegurará la estabilidad del Gobierno "en función de acuerdos concretos" y que no le importa poner en dificultades a los socialistas para que entiendan que los nacionalistas van en serio.

Fuentes de la dirección del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) vaticinan que el resultado más probable de la negociación con los nacionalistas es un acuerdo parlamentario. Ni los socialistas catalanes ni Pujol están interesados en una coalición, ya que esto recortaría su margen de maniobra en Cataluña.

Repercusiones en Cataluña

Un acuerdo parlamentario bastaría al F5C para neutralizar el discurso convergente que culpa a los socialistas de los males de Cataluña. Y al no haber Gobierno de coalición, la labor de oposición del PSC no quedaría aplastada por el acuerdo en Madrid.

Pujol no tiene prisa por hablar con González y entiende que corresponde a éste la iniciativa. El político nacionalista sí ha dejado claro que, para que las conversaciones 9leguen a buen puerto", deben desarrollarse entre él y González, no entre Narcís Serra y, Miquel Roca.

Pujol, enfrentado con Serra, no está dispuesto a dejar de dirigir las conversaciones. De ahí que Roca -proclive a la coalición- se haya apresurado a indicar que González aún no le ha telefoneado, en lan intento de no estropear las negociaciones. Medios próximos a Pujol. se inclinan por dos niveles de conversaciones. Por arriba, dirigiendo, González y Pujol. Por debajo, quizá dos comisiones del PSOE y de CiU.En esta delegación figurarían, además de Roca, Josep Antoni Duran Lleida, líder de Unió Democrática -socio de CDC-, y un segundo dirigente de Convergéncia aún por designar. Habida cuenta de la importancia de los acuerdos económicos en la negociación, medios nacionalistas apuestan por el consejero de Economía, Maciá Alavedra, número dos del Gobierno catalán y hombre de confianza de Jordi Pujol, y encargado de negociar en su día la cesión del 15% del IRPF.

A diferencia de legislaturas anteriores, los acuerdos deberán ser conocidos por las direcciones del PSOE y CiU, lo que se interpreta como un marcaje a Roca. Unió ha advertido que no suscribirá compromisos derivados de conversaciones en las que no participen sus representantes.

Por otra parte, Pujol recibió ayer al líder de Iniciativa per Catalunya, Rafael Ribó. Ambos trataron de la candidatura de Roca a la presidencia del Congreso [Roca ha manifestado esta semana a Europa Press que no es candidato] y de la posibilidad de que la oposición acuerde candidatos para la presidencia del Senado y otros cargos institucionales.

Ribó destacó que IU-IC no formará una tenaza con el PP y los nacionalistas para ahogar al PSOE, pero que tampoco permitirá que los socialistas controlen todas las instituciones