Pujol resucita el proyecto de un banco publico catalán

El presidente de la Generalitat de Cataluña y de Convergència Democrática (CDC), Jordi Pujol, ha pedido al consejero de Economía y Finanzas, Macià Alavedra, que ultime en las próximas semanas el estudio sobre la creación de un banco público catalán. La propuesta nacionalista tiene como objetivo, dijo Pujol, invertir la "situación de discriminación sistemática en que se encuentra Cataluña" respecto al resto de comunidades autónomas. La iniciativa se produce en plena campaña electoral y recupera una idea vieja de los años ochenta, cuando Josep Maria Cullell era consejero de Economía.

La opción tiene entre sus objetivos contrarrestar la iniciativa de Esquerra Republicana, que reclama para Cataluña la aplicación de un sistema de concierto similar al vasco, al tiempo que trata de crear un instrumento financiero autónomo. A principios de 1991, Alavedra ya tuvo sobre la mesa un proyecto de creación del banco autónomo público, que por aquel entonces pasaba por ampliar las competencias del Instituto Catalán de Finanzas (ICF).Alavedra rehusó ayer detallar si el proyecto actual parte de la base de ampliar las competencias del ICF. "De lo que se trata es de crear un banco catalán público", señaló, al tiempo que se negaba a dar mayores detalles: "Es un proyecto en el que hace ya tiempo que trabajo y que ahora adquiere rango oficial", indicó Alavedra, quien negó cualquier relación entre esta propuesta y un hipotético fracaso del traspaso del 15% del IRPF a las comunidades autónomas.

Medios de la Generalitat han precisado que la ley de creación del Instituto de Finanzas prevé para este organismo un abanico de posibilidades que aún no ha desarrollado. Por ejemplo, la prestación de los servicios de tesorería de la Generalitat, llevar a cabo la gestión financiera de las emisiones de deuda pública o de títulos, similares, ejercer funciones de inspección sobre los intermediarios financieros y tomar participaciones en entidades financieras públicas y privadas siempre que no superan los límites de sus recursos.

Discriminación

"Es un asunto demasiado importante Para hablar de él ahora", indicó Pujol en una conferencia de prensa. Pujol trazó un panorama claramente discriminatorio de Cataluña respecto al resto de las comunidades: "Por un lado, las autonomías de concierto [País Vasco y Navarra] tienen muchas ventajas sobre nosotros; después, la autonomía de Madrid, que tiene una mala financiación, pero que por otros conductos que no son los autonómicos le llegan muchos ingresos; tenemos las autonomías de poco desarrollo, que reciben mucho dinero... Finalmente, el Gobierno invierte poco en Cataluña y eso nos preocupa".

En los últimos meses, el Gobierno catalán ha puesto el acento en lo que considera una situación de privilegio del País Vasco, sobre todo a raíz de la reciente decisión del Gobierno autónomo de eximir del Impuesto de Sociedades durante 10 años a las nuevas industrias que cumplan determinados requisitos. La Generalitat considera que las nuevas empresas vizcaínas se benefician de una subvención a fondo perdido del 18% de la inversión a cargo del Gobierno vasco y otro 20% puede ser deducido del pago de impuestos.

Pujol añadió una crítica a los ministros catalanes, a quienes responsabilizó de cuestiones tan trascendentales como que no se haya transferido a Cataluña parte del IRPF. "Nos tenían que resolver todos los problemas y se han convertido en cómplices de los gravísimos incumplimientos del Gobierno con Cataluña".

Pujol confirmó ayer que el consejero de Política Territorial, Joaquim Molins, abandonará en breve el Gobierno catalán para incorporarse a la candidatura electoral de CiU. Molins irá en segundo lugar en Barcelona, en el puesto que ocupó en 1989 Josep Maria Cullell, quien, finalmente, renunció a repetir como diputado. Pujol avanzó que ahora tan sólo hará un cambio en el Gobierno -el del consejero de Política Territorial- y quedará para más adelante la reforma que proyectaba.