La OTAN confía en mostrar su vigencia con la intervención en Bosnia

"Si la OTAN no interviene en Bosnia-Herzegovina, se cuestionará su utilidad. Pero si la operación fracasa, la Alianza puede entrar en crisis", afirman fuentes aliadas. Los máximos responsables de la OTAN en Bruselas son conscientes de que la organización se juega su futuro en el conflicto de los Balcanes.La Alianza ha dado un paso adelante y ha decidido intervenir en el conflicto, pero no sin poner una serie de condiciones que, según fuentes aliadas, "sirven para garantizar la eficacia de la operación".

Aunque la misión de paz, encargada de aplicar el plan Vance-Owen, obedecería a un mandato del Consejo de Seguridad de la ONU, su mando y control, así como el planeamiento, quedaría en manos de la OTAN, que por primera vez en su historia intervendría como tal en un conflicto.

Esta exigencia requerirá una compleja negociación, en primer lugar con la ONU, y luego con los países no aliados que participen en la fuerza de paz.

Se estima que la Alianza aportaría unos dos tercios de los 50.000 a 100.000 militares que será preciso enviar a la zona, por lo que la operación ha sido bautizada con el nombre de NATO Plus (OTAN más otros).

Se da por descontado que países del antiguo Pacto de Varsovia, como Polonia, no tendrán inconveniente en poner sus tropas bajo mando de EE UU, que aportará unos 25.000 soldados al contingente. No ocurre lo mismo con Rusia. Se considera imprescindible a Moscú, pero hay división de opiniones sobre las tropas rusas, pues se duda de su disciplina y de que mantengan la neutralidad.