Bertrán de Caralt: "Se han dado cuenta de que yo no tengo nada que ver con el caso"

"El juez tenía dos o tres pistas y una de ellas era yo. Ahora creo que se han dado cuenta de que yo no tenía nada que ver". Esa es la opinión del industrial José Felipe Bertrán de Caralt, uno de los querellados por el fraude fiscal de 1.500 millones y en libertad tras declarar el pasado viernes. El industrial aseguró ayer, en una entrevista a este diario, que no ha participado en inversiones con DNI falsos o a través de sociedades instrumentales y que no tiene nada que ver con operaciones de dinero negro. Bertrán admitió que, al entregarse, tenía el convencimiento de que estaría detenido unos días.

"No he hecho ese tipo de operaciones ni con esas personas -en referencia a los querellados en la causa- ni con ninguna otra. Al presentarme ante el juez llevaba mi patrimonio y me he comprometido a entregar todo lo que haga falta para que lo comprueben", asegura Bertrán. El industrial figura en un procedimiento en el que el juez investiga una bolsa de dinero negro "con la que no tengo nada que ver". Fuentes de la investigación han sostenido que la mayor parte del dinero supuestamente defraudado en este caso es de Bertrán de Caralt. Él lo niega y su abogado entregará al juzgado las declaraciones de renta y movimientos bancarios de los últimos cinco años para demostrarlo."Yo pensaba que si me había llamado -en referencia al juez- era porque tenía algo Pero me di cuenta de que no era así cuando me empezó a preguntar sobre los otros querella dos", cuenta el empresario, al cabo de 24 horas de salir del juzgado en libertad. Por el momento no ha sido exculpado de los cargos de falsedad en documento y fraude fiscal, formulados en la querella presentada por la fiscalía, y por ello tiene la obligación de presentarse tres veces al mes. Bertrán, que también es abogado, no se escandaliza porque sobre él se haya dictado una orden de detención. "Si el juez está con una operación de ese tipo y cree que puede ser un delito grave... Tal vez yo hubiera hecho lo mismo".

"Conozco a algunos de los querellados. Por supuesto, a mismo Miguel Morenés, pero a mayoría, no", explica al ser preguntado sobre el resto de los inculpados. El industrial reconoce que ha mantenido o mantiene alguna relación de negocios con dos de ellos: Timoteo Ramírez y Manuel Ribas. En referencia a Jaime Parera, dice: "Le he visto una o dos veces en el edificio de mi despacho, donde muchas empresas tienen también oficinas y tenemos servicios comunes". Del resto: "no sé nada". De Manuel Tramullas, uno de los supuestos testaferros para la colocación de capitales con DNI falsos que, según la policía, estaba a sueldo de Bertrán, dice no conocerle: "Ni le conozco, ni se donde vive. Ni le he pagado nunca". Del letrado Josep Maria Caminals, también encausado, afirma no haberle visto jamás.

Hay que estar a todas

"No me presenté al juez antes porque estaba en Madrid. Sé que fueron a mi casa, pero luego tuve que ir a otro sitio por un asunto urgente. Cuando lo resolví, vine y me entregué", explica. "Hay que estar a todas. Yo lo que no quería es que me detuviera la policía. Quería ir al juzgado por mi propio pie. No hice caso del consejo de mi abogado que me advertía que si me entregaba el viernes iría a prisión porque el juez lo había acordado. Yo quería aclarar esto. Me imaginaba que me detendrían tres o cuatro días, como a los demás. Pero al llegar allí y ver como estaba el patio pensé que serían 15", relata. Bertrán, tras este episodio judicial, dice que "si me hubiesen metido en la cárcel, me hubiera sentido como un delincuente, como un presunto delincuente".