El ministro italiano de Finanzas rechaza las acusaciones de corrupción política

El ministro italiano de Finanzas, el socialista Franco Reviglio, rechazó ayer toda responsabilidad en la financiación ¡legal de los partidos y advirtió que está decidido a iniciar acciones legales para defender su honorabilidad. El político había sido colocado en el punto de mira por Gabriele Cagliari, también de influencia socialista, presidente del grupo estatal petrolero italiano (ENI). Según ha informado la prensa, Cagliari ha admitido ante el juez haber pagado ilegalmente 20.000 millones de liras a la Democracia Cristiana (DC) y al Partido Socialista Italiano (PSI).

Cagliari afirma además que hizo esos pagos a través de un sistema que heredó cuando llegó al Ente y que convertía en práctica habitual las contribuciones ¡legales a la financiación de los partidos mediante operaciones tramitadas por lo general en el. extranjero. Es ahí donde Reviglio se ha sentido directamente aludido, pues el actual ministro de Finanzas fue el predecesor de Cagliari en la presidencia del ENI, que desempeñó entre 1983 y 1989.Respondiendo a estas alusiones, el ministro declaró ayer que él fue llamado a la dirección del ENI precisamente para hacer limpieza tras- los escándalos de finales de los años setenta que implicaron al Ente en el pago de comisiones ¡legales a los partidos.

Por otra parte, destaca la decisión del líder de la Liga del Norte, Umberto Bossi, de excluir de la actividad en el movimiento durante siete días al diputado Luca Leoni Orsenigo, que el pasado martes provocó un tumulto en la Cámara al mostrar una soga de ahorcado al Gobierno. La sanción intema, más benévola que la suspensión por siete sesiones parlamentarias con la que el presidente de la Cámara, Giorgio Napolitano, castigó al diputado, sugiere que Bossi duda al menos del efecto electoral de estos incidentes parlamentarios que los liguistas están convirtiendo en habituales.