Aparcamientos para residentes sin residentes

El programa municipal de construcción de aparcamientos baratos para residentes (PAR) empieza a no responder a su denominación. Las plazas se encarecieron desde que el Ayuntamiento implantó un impuesto especial de hasta 750.000 pesetas sobre ellas. Además, los estacionamientos están dejando de ser para residentes porque la concejalía de Circulación está permitiendo a sus promotores que vendan las plazas que no adquieran los vecinos "a cualquier persona que lo solicite".

Ayer, en el pleno municipal, se dio autorización a cuatro aparcamientos. "A tres de ellos se les permitió construir una planta extra porque consideraban que la demanda iba a ser mayor", explicó el concejal socialista Eugenio Morales. "Ahora resulta que venderán las plazas a cualquiera que pase por allí. Ése no era el objetivo del plan".

Según el concejal de IU José Luis Pestaña, el programa está bloqueado desde el pasado mes de abril. "En este tiempo se han convocado 51 concursos para construir y gestionar aparcamientos para residentes [siete en el pleno de ayer] y aún no se ha adjudicado ninguno", comentó. Es más, alguno de ellos ha tenido que ser declarado desierto por falta de empresas interesadas.

El concejal de Circulación, José Antonio García Alarilla, culpó a la crisis económica de que los clientes potenciales, los vecinos, se retraigan. "Qué le vamos a hacer si la cosa está peor de lo que estaba", comentó. El mismo argumento empleó para justificar la falta de interés de las empresas constructoras. "La economía está muy mal".

Tampoco apoyó la oposición la nueva convocatoria preparada por el Gobierno municipal para construir un paso subterráneo bajo la plaza de Conde de Casal. La anterior se declaró desierta porque la concejalía de Obras consideró oportuno prescindir de varias piezas del proyecto inicial, como el intercambiador de transportes (paradas de autobús conectadas con el metro).

Morales recalcó el poco caso que se hace a la concejalía de Circulación en estos proyectos. "Circulación era partidaria del intercambiador, pero Enrique Villoria [concejal de Infraestructuras] sólo quiere hacer obras, aunque no sirvan para nada". Pestaña indicó que el túnel, al que acompañará un aparcamiento para residentes, "será lesivo para los intereses de los madrileños y para el Ayuntamiento, que deberá aportar 1.500 millones de pesetas". Villoria comentó que es un proyecto útil "que suprimirá el último conflicto circulatorio entre la ciudad y una de sus grandes vías de acceso [la autovía de Valencia], como se ha hecho en las plazas de Castilla y Cristo Rey o en la calle de Cartagena.