El paro bate todas las previsiones y afecta ya a más de tres millones de españoles

La realidad ha sido mucho peor que la previsión más desfavorable. Durante el último trimestre del pasado año el paro se disparó hasta alcanzar a 3.047.120 personas. Se trata de la cifra más alta de la historia de España, según los datos de la Encuesta de Población Activa. El número de desempleados aumentó en 480.000 a lo largo de 1992 -sólo el último trimestre registró un crecimiento de 266.470-, llevando la tasa de paro a superar la barrera del 20%, lo que supone una de cada cinco personas que quieren trabajar. El ministro de Economía, Carlos Solchaga, manifestó ayer en Bruselas que se trata de un dato "triste y sorprendente".

La crisis de la economía española sigue cebándose especialmente en el empleo, y sin tocar fondo. La gravedad de la destrucción de puestos de trabajo en el último trimestre no queda sólo en la ex plosión de las propias cifras, sino que se plasma en todos los sectores de la producción. El paro en los servicios se disparó en el último trimestre, con 116.000 empleos menos. También la industria registró un claro empeoramiento: 74.000 puestos de trabajo destruidos en los tres últimos meses.El Ministerio de Economía justifica el aumento del desempleo por "el deterioro de la coyuntura económica,, y reitera su defensa de la moderación salarial como mejor antídoto. "La evolución del empleo en 1993, aunque dependerá básicamente de la recuperación de la actividad, también estará influida por los aumentos salariales", dice el ministerio.

El aumento del paro en Europa preocupa especialmente a los Doce. Ayer, el Ecofin (Consejo de Ministros de Economía y Finanzas) adoptó el compromiso de elaborar una macroencuesta, país por país, sobre el problema del desempleo, en la idea de convocar posteriormente un Consejo de Ministros extraordinario para debatir cómo enfrentarse a este problema.

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