Luis Álvarez se hace cargo de una parte de la deuda de Valencia Taurina a ocho toreros

Josep Bressó, diputado-presidente de Cultura y Espectáculos de la Diputación de Valencia, declaró a EL PAÍS que ha conseguido del apoderado y empresario Luis Alvarez, consejero-delegado de Valencia Taurina, SA, que se haga cargo de cinco millones de los 20 que la mencionada empresa adeuda a ocho toreros.

La deuda a los toreros es en concepto de honorarios impagados y se generó cuando la sociedad Valencia Taurina explotaba el coso valenciano, propiedad de la Diputación. El contrato de cesión le fue rescindido en julio de 1991 (un día antes de que empezara la tradicional Feria de Valencia), por sus presuntos incumplimientos. Al parecer, Valencia Taurina tiene otras deudas pendientes, y la Diputación hubo de hacer frente, entonces, al pago de los derechos de televisión que la empresa no había abonado a los subalternos.Bressó comentó así la petición de varios toreros de que la Diputación pague la totalidad de los honorarios que se deben: "Me ratifico en lo que ya he dicho otras veces: es absolutamente imposible, por ilegal, que nos hagamos cargo de esa deuda". Y añadió: "La piña que anunció el veto a nuestra plaza de toros se está desmembrando".

La Comisión Mixta de Seguimiento y Arbitraje del Convenio Nacional Taurino, que representa a los profesionales de la fiesta en todas sus categorías, anunció en enero que vetaría el coso si no se pagaba la deuda antes del 20 de febrero. "El bofetón que pretenden darle a la Diputación de Valencia se lo darán en la cara a los aficionados valencianos", añadió Bressò, quien se mostró convencido de que se celebrará la feria taurina de fallas.