La dirección no aceptará pasos atrás en la fijación de incompatibilidades

La dirección del PP advirtió ayer, a través de Federico Trillo, encargado de defender la ponencia sobre reforma de estatutos, que no admitirá "un paso atrás" en el planteamiento de las incompatibilidades internas. El margen de decisión del congreso queda reducido así a aprobar la propuesta actual o a ampliarla, como quieren algunos sectores del aparato sin la oposición de José María Aznar.La reforma de los estatutos propuesta impide a los presidentes y secretarios generales regionales o provinciales ocupar un escaño en el Congreso de los Diputados. En este caso se encuentran en la actualidad unos 15 diputados. La reacción que se considera previsible en la mayoría es continuar en el escaño y abandonar la presidencia o secretaría.

Cualquier presidente o secretario general de agrupación local, por otra parte, sólo podrá ocupar un cargo público. Si éste es de ámbito local, provincial o autonómico, se considera compatible además con un escaño de senador.

La reforma tiene varios objetivos. Primero, conseguir más dedicación y profesionalidad en el desempeño de cualquier tipo de responsabilidad en el partido o en su representación. Además, pretende abrir huecos y facilitar la renovación generacional y la incorporación de quienes se han afiliado en los últimos años.Récord de enmiendas

Al final, la salida lógica del proceso sería contar con responsables provinciales y regionales más afines a la línea de la actual dirección y al propósito de centrar progresivamente el partido sin ceder espacio por la derecha. La expectativa de un crecimiento electoral permite a la dirección abordar un número significativo de incorporaciones al grupo parlamentario del Congreso de los Diputados sin necesidad de desalojar a actuales diputados.

Si algún cambio se produce en la ponencia de estatutos, que ha recibido 151 enmiendas -más que ninguna otra- será en el sentido de ampliar los criterios de incompatibilidad. Una parte de las enmiendas pretende impedir que los alcaldes puedan acceder a un escaño en el Congreso de los Diputados.

Aznar declaró la semana pasada en Valencia que no se opondrá a esta ampliación si el congreso la desea. Aunque el presidente se reserva la decisión final, sus colaboradores estimaban ayer que el sentido de las enmiendas demuestra que la posición favorable a la ampliación es mayoritaria.

Al margen de que la ejecutiva se reserva en los estatutos la posibilidad de autorizar excepciones en casos extraordinarios y en función de los intereses generales del partido, esta última vertiente de la reforma estatutaria conseguiría, según la dirección del Partido Popular, un efecto lógico, en el sentido de que el líder local pugne por conseguir la alcaldía y no se limite a esperar "dar el salto a Madrid".