Matanzo recula y el alcalde piensa en una salida
José María Álvarez del Manzano no empleó en esta ocasión la fórmula del aquí no pasa nada para resolver la enésima crisis abierta por su concejal Ángel Matanzo. Porque en esta ocasión sí ha pasado algo. El alcalde se ha dado un breve plazo de tiempo para decidir si ejecuta la remodelación pendiente de su equipo de gobierno. Sería la salida al enfrentamiento protagonizado por el concejal de Cultura, Pedro Ortiz, y el concejal de Centro. Éste último puso su cargo a disposición del alcalde, pero no dimitió, tal como había anunciado el lunes públicamente.
Lunes por la noche. Matanzo le dice al magnetófono: "Pienso dimitir como concejal de Centro; el escaño es mío, voy a seguir en mi partido. Si mi alcalde me la admite [la dimisión], es que no está conforme con mi política, y si no me la admite, es que está conforme".
Martes por la mañana. Matanzo declara después de reunirse durante cerca de una hora con el alcalde: "Aquí nadie ha dicho nada de dimisión. Si yo hubiera decidido dimitir la hubiera presentado. Una dimisión se hace por escrito, a ver si nos entendemos ( ... ) Yo he podido decir que si no están a gusto conmigo algunos señores dejaba el cargo. Pero eso es diferente a ir al alcalde a decirle que si le perjudico me voy".
Fue el quinto órdago del mismo estilo que lanzaba Matanzo (véase EL PAÍS de ayer). Los cuatro anteriores se saldaron con el tupido velo corrido por el alcalde. Pero a Álvarez del Manzano le ha pillado ya cansado este nuevo reto del concejal de Centro y sus colaboradores creen que ha llegado el momento de tomar una decisión que acabe con las cíclicas crisis provocadas por Matanzo. En este mismo paquete se incluye al concejal de Cultura, Pedro Ortiz, cuyo intento de transmitir una imagen más pro gresista de la cultura del PP [acudiendo al teatro Alfil, que había ordenado precintar Matanzo] tampoco ha gustado al alcalde. Pero, ¿qué hará Álvarez del Manzano?
Decidirá en su momento
El alcalde, de momento, ha preferido callar. Ayer escuchó a Matanzo, que de nuevo le expuso las limitadas competencias que tiene frente a los problemas del distrito, y se ha dado un plazo de tiempo para tomar una decisión. Así lo dijo el primer teniente de alcalde, Luis María Huete, presente en la reunión: "Ha habido un cambio de impresiones. El alcalde decidirá en su momento, una vez estudie los problemas que le ha planteado el concejal y las circunstancias que hay".Ángel Matanzo no salió de la reunión con el cargo garantizado. "Él [el alcalde] pensará lo que tiene que hacer. Es el que manda", comentó.
-¿Y qué espera que pase? -le preguntaron los periodistas.
-Ahí está su inteligencia y su saber hacer. -¿Qué le ha dicho el alcalde?-Me ha dicho que tengo que seguir en mi puesto y que ya tomará él una decisión. Y no hay más. Además, tendré que pedir un descanso dentro de unos días porque tengo que darme el láser en la vista. Ángel Matanzo padece una diabetes que amenaza con dejarle ciego, aunque sus problemas de salud "no influyen ni a favor ni en contra en esta situación", explicó ayer su compañero Luis María Huete.
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