Controlar la prensa
Rara vez la prensa británica, de la más sensacionalista a la de mayor rigor, se ha mostrado tan unida en la defensa de unos intereses creados. No es extraño; se trataba de sus propios intereses, amenazados por un informe sobre su actuación encargado por el Gobierno. ( ... )Éste es un terreno peligroso. Los ricos y poderosos explotarán cualquier oportunidad para impedir la publicación de aquello que les resulte molesto. Sin embargo, ser molesto es un ingrediente fundamental del trabajo periodístico cuando se trata de denunciar la hipocresía y la corrupción a alto nivel. La prensa está ahora sobre el tapete, no por decir falsedades, sino por revelar verdades embarazosas. Jugar con la libertad de prensa es especialmente arriesgado en el Ricino Unido, donde no hay garantías constitucionales de libertad de expresión, ni una ley de libertad de información, y sí un exceso de celo en las leyes de protección al honor. ( ... )Hay una forma de abordar el problema sin minar la libertad de prensa: reconocer el derecho a la intimidad, pero introduciendo criterios rígidos que aseguren a los periodistas la posibilidad de hacer su trabajo. Criterios como que la intrusión en la vida privada está justificada si un jurado decide que se realiza por interés público. El demandante, a quien corresponderá probar lo contrario, podrá recurrir al juez una vez que el artículo o fotografía haya sido publicado, pero no impedir la publicación.
16 de enero
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.