Israel autoriza la visita de la Cruz Roja a los palestinos deportados

Israel dio ayer autorización al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) para que una misión de dos miembros visite el campamento de los 415 palestinos desterrados en el sur de Líbano y salga de territorio israelí. La decisión constituye el primer gesto de flexibilidad en la crisis de los deportados y la Cruz Roja espera que marque el inicio de negociaciones. destinadas a aliviar la situación de los palestinos atrapados en un desolado paraje montañoso desde el 17 de diciembre.El gesto israelí coincide, con la intensificación de esfuerzos diplomáticos para desactivar un conflicto que ha costado a Israel la condena unánime en las Naciones Unidas. "Creo que se trata de un importante primer paso", declaró en Jerusalén Reto Meister, jefe del CICR en Israel y los territorios ocupados.

Anoche no se sabía exactamente cuándo partiría la misión de la Cruz Roja. Meister explicó, sin embargo, que su tarea será exclusivamente de información y que no llevará material de ningún tipo. "Servirá para determinar cuáles son las necesidades del campamento, no para llevar ayuda"', dijo. Fuentes informadas dijeron que los dos miembros del CICR viajarían en un helicóptero de la fuerza de paz en Líbano FINUL. El Gobierno del Libano aseguró ayer que permitirá la visita de la Cruz Roja a los deportados que se encuentran en su territorio. "Lo permitiremos por una vez", dijo el primer ministro libanés, Rafik al-Hariri. "El helicóptero no sobrevolará territorio libanés liberalizado, volará sobre tierra ocupada".

Hasta ayer, Israel se había negado a permitir el paso a organismos humanitarios alegando que los palestinos están en territorio libanés. El cambio de actitud israelí responde a las presiones de Estados Unidos, que exige moderación al régimen de Tel Aviv a cambio del veto norteamericano en un eventual voto de sanciones contra Israel en el Consejo de Seguridad de la ONU, informa Víctor Cygielman.

Enviado de Butros Gali

La situación de los palestinos estuvo ayer al centro de las conversaciones entre el secretario general de la ONU, Butros Gali, y el presidente egipcio Hosni Mubarak, en El Cairo. Hoy llega a Israel el embajador Chinmaya Gharekhan, emisario personal de Gali, en su segundo intento en 20 días por persuadir a Rabin de que respete la resolución 799 del Consejo de Seguridad. Esa resolución condena las deportaciones y exhorta a Israel a repatriar a los palestinos. El secretario general de la ONU ha dicho que, si Israel no cumple, el organismo mundial se vería obligado a adoptar "otras medidas".

La Liga Arabe debatirá la cuestión de los deportados la próxima semana en la capital egipcia. Los árabes insisten en que la única solución es que Israel permita el retorno de los expulsados y han advertido que de ello depende el futuro de las conversaciones de paz entre Israel, Siria, Jordania, Líbano y los palestinos.