"Ruiz Gallardón aplica la sospecha permanente", alega el PSOE
El Gobierno regional socialista apenas tardó cinco horas en recoger el guante lanzado por el Partido Popular. "En la Comunidad siempre hemos buscado la transparencia y la legalidad, pero si quieren que se investigue, adelante no es cuestión de decir, es cuestión de probar", sentenció ayer el consejero de Hacienda, Ramón Espinar, acompañado por el portavoz del Ejecutivo, Jaime Lissavetzky.Espinar rechazó las imputaciones del líder regional del PP, Alberto Ruiz Gallardón, sobre supuestas irregularidades en contrataciones. Más tarde le acusó de intentar crear entre los ciudadanos "una cultura de la sospecha permanente sobre los cargos públicos relacionados con el PSOE".
Para el consejero de Hacienda, si se descubre que ha habido "irregularidades técnico-administrativas", se deberán subsanar y depurar las responsabilidades. "Con el gran volumen de contratación de la Comunidad, algunos errores habrá", reconoció Espinar. Sin embargo, advirtió que si el PP considera que hay actuaciones "ilícito-penales" deberá acudir a los tribunales.
Lissavetzky, también consejero de Educación y Cultura, señaló que el PP pretende crear "una comisión de sospecha, y no una comisión de investigación". Al mismo tiempo replicó a Ruiz Gallardón: que las dos contrataciones de su departamento con Construcciones Atocha se habían adjudicado, por el procedimiento de subasta, a la oferta más baja.
Virgilio Cano, consejero de Cooperación, consejería que acapara las denuncias del PP, no asistió ayer a las sesiones del pleno de la Asamblea.
"Pérdida de tiempo"
El portavoz de Izquierda Unida en la Comisión de Presupuestos de la Asamblea, José Antonio Moral Santín, afirmó ayer que si su grupo "tuviese constancia y hubiese llegado a las mismas conclusiones que el PP no estaría hablando de una comisión de investigación, estaría ya en los juzgados". No obstante, Moral consideró que la creación de una investigación especial supone "una pérdida de tiempo" cuando ya existe la Comisión de Vigilancia de las Contrataciones.Felipe Rey Patiño, ejecutivo de Construcciones Atocha, resultó herido en un atentado con paquete bomba el 2 de agosto de 1991. En ese momento, su empresa era adjudicataria, a través de la compañía Ramos Hidalgo, de obras en la autovía de Leizarán, entre Navarra y Guipúzcoa.
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