"Intuyo que mi papel es ejercer de árbitro"

Su nuevo despacho mejora con creces el anterior, situado en el Ministerio de Sanidad. Se halla ahora en las estancias centrales del palacete de la calle de Miguel Ángel. La entrevista se desarrolló a última hora de la tarde del miércoles, 24 horas después de jurar su cargo en Interior.Pregunta. ¿Tiene claras cuáles son sus competencias? ¿Va a limitarse a ser un gobernador?Respuesta. Yo estoy precisamente estos días analizando esta cuestión. Al estar aquí la sede del Gobierno central, las competencias quedan solapadas. Yo intuyo que la función fundamental de esta delegación es intentar coordinar los esfuerzos de todos. Aparte de las funciones conocidas, es intentar hacer de impulsor, de coordinador.

P. Se atribuye el papel de árbitro, como ya han hecho sus predecesores en el cargo.

R. Exacto. Es buscar en cada momento dónde empiezan y acaban las competencias de los demás, y donde nosotros no tenemos, actuar de árbitro. En el tema del realojamiento de los dominicanos creemos que es labor nuestra impulsar esa coordinación. Nos vamos a encontrar con un tema importante que ya está en marcha: intentar coordinar mejor las competencias en materia de droga en la Comunidad de Madrid en el terreno de la prevención, asistencia, rehabilitación e inserción. Es estar en el centro del ruedo para saber a quién puedo acudir para que aporte algo positivo, ya sea un ministerio o una organización no gubernamental. He visto en estos pocos días la buena voluntad de las partes de aceptar como árbitro a la delegación del Gobierno en temas en los que no tiene competencias.

P. Las fuerzas políticas madrileñas acusan a la delegación de no poner nunca un duro.

R. Es que el, Gobierno ya ha hecho las transferencias. a la Comunidad. No me pida que haga un sobreesfuerzo. Es la comunidad autónoma la, que tiene el dinero. Otra cosa es cuando hay discrepancias en temas en los que un Ayuntamiento necesita dinero para un tema determinado que provenga de la comunidad autónoma. Lo que no puede ser es que usted me cobre dos veces.

P. ¿Cree que, como dice el alcalde de Madrid, el problema de los inmigrantes es del Estado?

R. Depende de cómo se mire. La responsabilidad en cuanto al control de fronteras es de la Administración. Pero una vez que esas personas están en un lugar ya es competencia de las administraciones locales. Realojar a los dominicanos de Aravaca es una responsabilidad que está transferida al Ayuntamiento y a la comunidad autónoma. Creo que eso ya lo ha entendido el propio Ayuntamiento, que ha puesto en marcha el colegio de San Blas. Lo que espero es que la sociedad sea también solidaria y no salga a la calle diciendo: "Realojamiento, sí; en San Blas, no"; "centro de asistencia a toxicómanos, sí, pero en mi barrio no"; "cárceles, sí, pero no en mi ciudad".

P. Veo que usted está asumiendo todos esos proyectos sociales que su antecesor en el cargo prometió y dejó pendientes.

R. Sólo le diré que, cinco minutos antes de entrar ustedes, salían de aquí el director de Migraciones y el de Política Interior; y hemos llegado a unos principios por parte de la Administración central que en próximos días serán presentados a la Comunidad y al Ayuntamiento y que pretenden dar solución al problema del realojamiento de los inmigrantes, previos incluso a la solución del colegio de San Blas. Porque los próximos 20 días pueden ser de mucho frío y no pueden seguir donde están. Yo asumo esa responsabilidad, aunque no sé si es competencia mía.

P. ¿Es usted consciente de que las administraciones madrileñas, de diverso signo político, viven una especial crispación? ¿A quién le teme más, al Ayuntamiento o a la Comunidad?

R. No temo a nadie. Desde la droga he adquirido una cierta experiencia en coordinar a 17 comunidades autónomas con la Administración central, con organizaciones ciudadanas y con otros países. Y creo que nunca he mantenido una política partidista. En Madrid me encuentro con una situación similar. En el caso de la droga, desde hace tres meses elaboramos una propuesta de plan conjunto entre los servicios de la Comunidad de Madrid y del Ayuntamiento de Madrid. El plan ya está diseñado, y espero que ambas administraciones lo aprueben en breve. Trata de, unificar los recursos humanos y asistenciales.

P. ¿Después de siete años en el Plan Nacional contra la Droga sigue pensando que no se puede despenalizar?

R. Sí, en absoluto. Se ha reafirmado. Con más información he llegado a la conclusión de que una política despenalizadora de libre venta nos traería más problemas que ventajas.

P. ¿Entonces se ha reafirmado también en la represión del consumo de drogas?

R. No. El hecho de que el tráfico de drogas esté penalizado no quiere decir que yo lo esté penalizando. Lo que digo es que no soy partidario de la venta y del tráfico de drogas. Y que me parece bien que esté como está: el consumo, con sanción administrativa, y la venta y el tráfico, con sanción penal. La asistencia no es represión; la rehabilitación, tampoco.

P. Pero a usted le va a tocar ahora ejercer la represión.

R. No mezclemos conceptos. Yo no estoy por la represión a ultranza. Yo he participado activamente en reuniones del Ministerio del Interior sobre cómo debían actuar las fuerzas de seguridad. He participado y he opinado sobre el tema. En el pequeño tráfico se va a seguir trabajando en presionar para que no se produzca, porque hay una ley que prohíbe ese trapicheo.

P. En su nuevo puesto, todo va a ser más pedestre. Aquí a lo mejor el edil Matanzo le pide que haga redadas en Malasaña.

R. Pero el señor Matanzo, al que no tengo el honor de conocer, tendrá una visión de Malasaña, y yo la tendré de todo Madrid, y quizá él piense que el problema está allí, pero yo vea que el problema no está allí, sino en Vicálvaro o en La Moraleja. Todos pensamos que el peor problema es el nuestro.

P. ¿Pero está de acuerdo en seguir haciendo redadas, por ejemplo, en el centro de Madrid para localizar inmigrantes ilegales o trapicheo de droga?

R. Eso es como cuando me decían si la Ley de Seguridad Ciudadana era la solución al problema de la droga. Es un planteamiento absurdo. No hay varitas mágicas. La Ley de Seguridad Ciudadana es un elemento más. En estos momentos se están aprobando en el Congreso unas leyes de lucha contra la droga más importantes que esa ley.

P. ¿Y las redadas? No me contesta a la pregunta.

R. Es nesario hacerlas. No todas las noches, porque perderían su eficacia, y no de forma Indiscriminada. Claro que soy partidario de hacerlas, pero hay que saber cuándo, cómo y dónde.

P. Dijo Juan Barranco, del PSOE, que le habría gustado que el delegado fuera madrileño.

R. Eso fue una broma, porque entonces también podríamos preguntar cómo un alcalde de Madrid puede ser de Jaén. Yo ya llevo siete años en Madrid. No sé qué es lo que hay que hacer entonces para tener el pasaporte madrileño. Creo que conozco los problemas de Madrid. Me parece que Juan se refería, con soma, a que soy militante del PSC [Partit dels Socialistas de Catalunya] y pago mi cuota mensual allí.

P. ¿Conoce usted sitios como La Celsa o Las Fronteras?

R. Sé dónde están, pero los visitaré. Recorreré prácticamente todo Madrid. Evidentemente, no lo anunciaré. Yo nunca re

"Tras siete años en el Plan contra la Droga, creo que la despenalizacion nos traería mas problemas que ventajas". nuncio a bajar a la arena. P. ¿Cree que Madrid es una ciudad insegura? ¿Teme por sus hijos, por ejemplo, más que si viviera en otro sitio?

R. Creo que Madrid tiene los mismos problemas que todas las grandes capitales. Comparar si es más o menos, es difícil. Si me guío por mí mismo, tengo que decir que nunca he sufrido un atraco, y salgo mucho a pasear o por las noches al centro de Madrid. Los niveles son similares a los de cualquier capital europea.

P. ¿Le preocupa el racismo?

R. Creo que no hay unos grandes colectivos de rechazo como en Alemania o en Estados Unidos. Los hechos que hemos tenido son brotes aislados. Lo importante es evitar situaciones no tanto de conflictividad social como laboral. España a lo mejor no puede recibir a cinco millones de inmigrantes porque no hay trabajo ni dinero ni viviendas para tanta gente. Además, creo que hay un planteamiento falso de entrada. En el problema de la droga vimos cómo había que hacer la reconversión de cultivos en los países reproductores. ¿Por qué no se le pide a la sociedad industrial que invierta en Marruecos, por ejemplo, e impedir así que vengan aquí? Es que a veces vemos sólo la consecuencia final del problema."

P. ¿Cree que la actitud del alcalde de Soto del Real y los de los alrededores es insolidaria? ¿Tiene opinión sobre el tema?

R. Todavía no la tengo, pero lo que digo es que ahí hay una decisión del Consejo de Ministros y del Ministerio de Justicia Digo que hay mecanismos legales para recurrir esa decisión Que la democracia tiene unos cauces. ¿Por qué no se utilizan?

P. ¿Usted habría intentado evitar las detenciones de alcaldes o la agresión a parlamentarios?

R. Es muy fácil con la moviola decir: "Yo habría hecho esto" Sólo he visto imágenes en el exterior de Plata Meneses. No sé lo que pasó dentro. ¿Se intentó impedir que entrara el camión? ¿Cómo se hizo? ¿De quién son los muebles? ¿En qué situación está la empresa? Decidir en un segundo porra sí, porra no, es muy difícil. Ninguno de nosotros permitiríamos el salvajismo en una manifestación y seríamos los primeros en pedir que interviniera la policía. Este año ha habido en Madrid quizá 200 manifestaciones; sólo en unas pocas ha habido conflicto. No es justo cargarse toda la labor de Segismundo Crespo por ello.

P. ¿Por qué aceptó el puesto?

R. Porque soy un responsable y porque soy irresponsable [se ríe]. Nunca he rehusado los problemas complicados. Acepté ser gobernador en Gerona con grandes conflictos, como el de extranjeros ilegales y fronteras. Este es otro reto importante.