Confusión en Sevilla sobre la legalidad de las multas por no cortar el agua
Las asociaciones de consumidores de Sevilla están recibiendo numerosas llamadas de consulta de vecinos y presidentes de comunidades de propietarios sobre la obligación de cerrar las llaves de paso desde las diez de la noche a las seis de la mañana, en cumplimiento del bando municipal que establece restricciones de agua para la ciudad de Sevilla y 38 municipios de su área de influencia. La responsabilidad del cierre de los grifos, que el bando impone a los presidentes de comunidad, y la legalidad o no de las sanciones por incumplimiento -que pueden alcanzar las 25.000 pesetas- han creado confusión y preocupación entre los usuarios.Según Francisco Sánchez Legrán, presidente de la Asociación de Consumidores de Sevilla (Acus), hay un "estado latente de preocupación sobre lo que deben hacer y la legalidad de las multas". Legrán señaló que los servicios jurídicos de la Acus están estudiando la posible ilegalidad de las sanciones. "La aplicación de la multa es dudosa y posiblemente sea recurrible por la vía contencioso administrativa".
La Acus tacha la medida de "negativa, impopular y poco propicia para crear el clima de colaboración ciudadana que se pretende para ahorrar agua". No obstante, hace un llamamiento a los sevillanos para que no abran los grifos durante la noche. La asociación aconseja a los usuarios que se repartan la tarea de cerrar los grifos de la comunidad de propietarios en los casos en que los presidentes no puedan hacerlo.
Grado de cumplimiento
En cuanto al grado de cumplimento de la obligación de cortar el agua, puesta en práctica desde la noche del martes, la delegación municipal de Medio Ambiente ha afirmado que aún es pronto para facilitar datos. "Hay que esperar un periodo de tiempo prudencial para que el dispositivo de vigilancia de Emasesa, la empresa municipal de aguas, se ponga en funcionamiento totalmente y los vecinos se vayan acostumbrando", explicó un portavoz.Técnicos de la empresa municipal controlarán las tomas de agua que se realicen durante las horas de prohibición. Según Emasesa, Sevilla tiene garantizado el suministro hasta junio de 1993.
De otro lado, el suministro de agua para consumo humano a los municipios de la Bahía de Cádiz y Jerez de la Frontera está garantizada hasta el próximo verano, según fuentes de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, informa Efe. Los pantanos que abastecen a esta zona se encuentran al 30% de su capacidad, y aunque la ausencia de lluvias ha agravado la situación, las actuales reservas garantizan el suministro hasta el verano.
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