'Castilla flagelada y muda'
Éste es el título de un libro de poemas de Ignacio Sanz (lastreño), publicado en 1977, en el que recuerda tiempos de su infancia. Han pasado muchos años más y aún seguimos igual, pero debemos quitar la última palabra, muda, porque a Castilla la sigun flagelando, pero... ya está bien. Protestamos. Y queremos que se nos oiga. Desde mi pueblo natal, Lastras de Cuéllar, del cual tengo hoy el honor de presidir su Ayuntamiento, me rebelo contra la discriminación que sigue sufriendo hoy Castilla y León, Segovia y mi pueblo. Una región agrícola con malas carreteras, falta de infraestructuras, obstáculo para instalaciones industriales y sin salida económica.Tero como un remate de puntilla, para que no nos quede nada, quieren poner una cárcel en nuestra querida Segovia de 1.250 residentes. A éstos, por buena conducta, les darán pase de fin de semana y los tendremos por toda la provincia; y por si esto no fuera bastante, nos quitan el cuartel de la Guardia Civil de Lastras.
Mi pueblo, al igual que Segovia, no tiene industria, e intenta, como ésta, tomar la única salida que le queda: el turismo. Estamos haciendo, con gran ilusión y máximo esfuerzo, un cámping de primera categoría de 200 plazas que puede crear 15 puestos de trabajo. Pero después de la noticia de la construcción de esa macrocárcel a 44 kilómetros y la próxima marcha del cuartel, nos preguntamos: ¿qué será de nosotros?
Lastras quiere a los guardias y se siente muy protegida con ellos. Los considera algo muy suyo, pues, según cálculos de nuestros ancianos, llevan aquí más de 100 años. Si se cumplen estas dos desagradables noticias, empezará a pasar algo, pero ya no tendrá remedio. Nosotros seguimos pensando que "más vale prevenir que curar".-
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