El Banco de España exige rigor en los créditos ante el aumento de impagados
El director general de inspección del Banco de España, José Pérez, lanzó ayer una seria advertencia al sector bancario y financiero, sobre la expansión del crédito en la actual coyuntura de crisis, "porque puede generar un aumento importante del riesgo, suponer una huida hacia adelante y deteriorar la calidad del crédito". Añadió que la morosidad de bancos y cajas se ha convertido en uno de los principales problemas del sector y que seguirá creciendo hasta "bien entrado el año 1994, y posiblemente durante el año 1993 alcanzará su cifra máxima histórica".
José Pérez apeló en Pamplona a la prudencia de los gestores de los bancos, para que no haya que lamentar las crisis financieras que en otras ocasiones comenzaron al reducirse la vigilancia del crédito. Pérez añadió que el servicio de inspección del banco emisor "extremará al máximo su celo en la evaluación de la gestión, así como en la veracidad de los estados contables".Durante su intervención en las XI Jornadas de Tesorería que organiza la Caja de Navarra y la Fundación FIES, José Pérez dijo que la recuperación económica no se producirá tan pronto como se había previsto. Aunque no quiso concretar cifras, se confesó más pesimista que el Gobierno en cuanto al crecimiento económico del próximo año. El director de inspección del Banco de España recordó a los tesoreros que las grandes crisis bancarias comenzaron por el deterioro de la calidad de los créditos y que este hecho hay que controlarlo con mucha firmeza.
"En una coyuntura como la actual, es bueno recordar que debe ahuyentarse cualquier tentación de buscar beneficios alternativos mediante operativa poco ortodoxa", añadió. En un encuentro informativo tras su intervención, Pérez recalcó que la banca debe volver a la gestión prudente, y no entrar en el mimetismo de los últimos años, cuando se presentaban beneficios cada vez más espectaculares y siempre mirando al vecino. En su opinión, hay que destacar también "el uso indebido que en ocasiones se hace de las tasaciones para determinar el valor de los activos".
Sobre el riesgo de tipo de cambio, que será fijado en una futura normativa que elaborará el Ministerio de Economía, José Pérez dijo que Ios servicios de inspección del Banco de España están perfilando su propio procedimiento de evaluación de ese riesgo, con una finalidad exclusivamente supervisora, ya que lo establecido en la directiva comunitaria sobre adecuación de capital es bastante insatisfactorio". Añadió que el Banco de España seguirá estableciendo límites a las posiciones de divisas que serán graduables en función del tipo de negocio y de la capacidad de la entidad para vigilar el riesgo de tipo de cambio. José Pérez descartó que haya un proyecto para establecer coeficientes en cuanto al riesgo de liquidez de las entidades bancarias.
Pesimismo oficial
El director de inspección del Banco de España dibujó un panorama poco optimista para el sector bancario. El beneficio contable bruto del conjunto de la banca, en los nueve primeros meses de este año, ha experimentado una caída del 16,2%, y ha pasado a representar el 1,2% del balance medio, frente al 1, 5 en igual periodo de 199 1. Esta caída refleja fundamentalmente la disminución del margen de explotación, un 11,9%, y el fuerte descenso, de los beneficios por ventas de valores. Las dotaciones y saneamientos han mantenido cifras muy similares en ambos periodos. Conviene reseñar, dijo, que en el tercer trimestre los saneamientos han sido mayores y eso ha hecho que los beneficios hayan caído un 37% sobre igual periodo del año 1991.En cuanto a las cajas de ahorros, la caída de beneficios brutos en los nueve primeros meses es más moderada (un 5,5%) y pasa a representar el 0,941/o del balance medio frente al 1,08% en igual periodo del año anterior. A diferencia de la banca, las cajas de ahorros han registrado un incremento significativo. del margen ordinario, el 15,3%. Sin embargo, el deterioro de los resultados de las cajas se debe a la caída de los resultados extraordinarios, es decir, venta de valores e inmuebles.
Para José Pérez, se confirma de este modo la caída de beneficios del sector que ya se apuntaba en el pasado año, y nos situamos cada vez más lejos "de los resultados brillantes, e incluso hasta anormales alcanzados en años anteriores. El escaso margen para el optimismo es todavía menor si se tiene en cuenta la actual situación " económica ", concluyó.
