El secretario de autonomías invita al edil de Hacienda a irse al sector privado

Francisco Peña, secretario de Estado para las Administraciones Territoriales, considera que el concejal de Hacienda de Madrid, Fernando López Amor, debiera dedicarse a la empresa privada si no cree en la Administración pública. Peña se refiere a una entrevista publicada en EL PAÍS el pasado 9 de septiembre, en la que el responsable de la hacienda municipal se declaraba partidario de reducir las competencias de los ayuntamientos.El secretario de Estado del Ministerio para las Administraciones Públicas declara en la revista Bando, editada por su departamento, y que se distribuye entre las corporaciones locales de toda España: "El Ayuntamiento de Madrid está abriendo un debate muy complicado, según el cual los ayuntamientos no debieran ejercer tantas competencias, que de alguna manera es contradictorio con la posición de que hay que descentralizar más servicios".

"Volver a la caridad"

"Hay un concejal tan importante como el de Hacienda", añade, "que ha planteado que este ayuntamiento quizá debería renunciar a prestar servicios en materias como deportes, cultura, ocio, educación, juventud, tercera edad. Pretender reducir, la actividad de los municipios a una especie de gran gestoría de obras públicas e inmobiliarias, que no tiene nada que ver con el modelo de ayuntamiento que funciona en el resto del mundo, equivale a hacer cierta la teoría neoliberal según la cual el sector público debe reducirse. Reducir el sector público y, por tanto, pretender minimizar las competencias de los ayuntamientos es condenar a las clases más débiles y desfavorecidas a su suerte. Es volver a la beneficencia y a la caridad".

"De seguir por ahí", concluye su razonamiento, "renunciaríamos a la figura del alcalde como líder moral; por eso es grave que el concejal de Hacienda de Madrid diga que cabe la supresión de algún servicio municipal y la privatización porque 'el dinero privado está mejor en manos privadas que en manos públicas'. No confía en la institución que representa. Si tiene más fe en lo privado que en lo público, su sitio está en lo privado".

El secretario de Estado encargado de la política autonómica y local del Gobierno es preguntado también en la entrevista sobre la futura Ley de Capitalidad de Madrid. Este texto, según Francisco Peña, está sufriendo un debate rebajado, "excesivamente mercantil", "y eso no es bueno". "El hecho de ostentar una capitalidad los alcaldes lo identifican generalmente con que les cuesta dinero, y se ha creado toda una filosofía de que los ciudadanos están peor tratados. En realidad, están minimizando que ser capital también les da un indudable prestigio".