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UN DECENIO DE PODER SOCIALISTA

La ejecutiva del PSOE margina a Narcís Serra de la campaña sobre los 10 años de gobierno

Anabel Díez

La ejecutiva del PSOE ha diseñado una campaña conmemorativa de los 10 años de gobierno socialista en la que pretende transmitir tres imágenes: el partido está cohesionado; el secretario general, Felipe González, y el vicesecretario, Alfonso Guerra, forman un tándem inseparable, y, por último, el PSOE es el único partido capaz de resolver la crisis económica de España y afrontar "el reto del 97". El vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, que se ha erigido en paladín de la renovación del partido, no tiene cabida en este diseño de campaña, que se prolongará tres meses.

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La campaña, que costará 90 millones de pesetas, empezará el próximo domingo con un mitin en Madrid coprotagonizado por Felipe González y Alfonso Guerra, como se anuncia en el cartel especialmente creado para e acto, en el que se reproduce la fotografía tomada a los dos políticos en la noche electoral del 28 de octubre de 1982 y en la que ambos, con las manos unidas, saludan desde una ventana del hotel Palace, de Madrid.La dirección del PSOE tenía preparado un golpe de efecto interno y externo al sacar a la luz el cartel anunciador del mitin del próximo domingo. Dicho cartel está compuesto por el lema, tanto del mitin como de la campaña en general, La fuerza del futuro, escrito con letras rojas. El cartel, con fondo azul, reproduce la fotografía.

En el mitin de Madrid, organizado por la ejecutiva del PSOE al igual que toda la campaña, no intervendrá el vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra. La dirección del PSOE ha querido dar la imagen de que todo sigue igual que hace 10 años, cuando González y Guerra ocupaban los números uno y dos del Gobierno y del partido.

El secretario de organización del PSOE, Txiki Benegas, al presentar la campaña, eludió todos los requerimientos sobre la participación de Narcís Serra en esta campaña y, sin pronunciar en ningún momento su nombre, se amparó en que las organizaciones socialistas de Cataluña -a la que pertenece Serra-, Galicia y Valencia harán su pro pio esquema de campaña, aun que los "objetivos" son iguales para todos.

Así, no pudo conocerse ayer si Serra participará en algunos de los 1.700 mítines programados para los tres próximos meses, aunque sí se aseguró que Alfonso Guerra participará en numerosos actos.

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Reforma del Inem

El objetivo ostensible de la dirección del PSOE ha sido el de evitar que se diluyera el mensaje que tenían previsto dar y que no era otro que el presentar su campaña. Así, Benegas remitió a la próxima semana para tratar de "cualquier asunto de actualidad".

En esta línea, no quiso comentar la propuesta de reforma del Inem efectuada por el ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, aunque, para continuar con la imagen de unidad, señaló que el ministro se había limitado a hacer "una oferta", y que ahora había que esperar la respuesta de sindicatos y empresarios.

A pesar de su parquedad, esta respuesta sobre el Inem puede considerarse extensa si se compara con el rechazo a comentar las manifestaciones del vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, efectuadas en la noche del lunes en Barcelona.

A Benegas se le hizo notar que mientras su discurso era autocomplaciente con lo realizado en los últimos 10 años, el vicepresidente Serra había mostrado perfiles autocríticos en la noche del lunes en un acto de los socialistas catalanes. "Yo no veo que haya dos discursos en el partido", insistía Benegas. Aun así, añadió que para la crítica ya se bastaba la oposición, que lo hacía de manera sostenida y sistemática.

Así, no hubo forma de conocer públicamente la opinión de la dirección del PSOE sobre las propuestas de regeneración de la vida política efectuada por Serra y su aseveración de que el partido no es de unos pocos sino de la sociedad, al tiempo que proponía luchar contra "el espíritu de secta".

Dirigentes del PSOE alineados con el sector guerrista se escudaron en que "en estos momentos" se impone la unidad. Felipe González no ha cesado de repetir en las últimas ejecutivas que la sociedad "no entiende las peleas internas". Alguno, no obstante, no pudo evitar la comparación de las propuestas de renovación de la vida política formuladas por el vicepresidente con las que se efectúan desde la dirección del PSOE, para concluir que son idénticas.

Regeneración

Las llamadas a la regeneración de la vida política y a combatir los intentos de "descrédito" de los políticos son moneda común en las reuniones de la ejecutiva, según plasman en documentos oficiales tras esas reuniones que dirige González. No obstante, la propuesta de Serra para luchar contra la endogamia y el espíritu de secta no ha figurado nunca en los documentos del PSOE.

Por el contrario, la ejecutiva recuerda que el secretario de organización, Txiki Benegas, trabaja desde hace meses en la reforma de la financiación de los partidos y ya se ha avanzado algo en el abaratamiento de las campañas electorales, en coordinación con Convergència i Unió y el Partido Nacionalista Vasco. Esta propuesta de abaratamiento figura también entre las enunciadas por el vicepresidente Serra el pasado lunes.

Quizá el elemento que menos satisface a la dirección del PSOE de las palabras de Serra es su afirmación de que el partido es de toda la sociedad. "parece lógico pensar que el partido es más de unos que, de otros y que los apoyos sociales nos vienen más de un lado que de otro", señaló un miembro de la ejecutiva socialista.

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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