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Un edil problemático

El alcalde Matanzo

El PP, no destituye al concejal de Centro porque tiene "dudas razonables" de que le reste votos

Francisco Peregil

Cuando Matanzo cierra un centro de homosexuales, de prostitutas, de diversión o acapara las primeras páginas de información local-comocuando tachó recientemente de corruptos a los miembros de Protección Civil-, el alcalde le llama al orden. Y comienza la representación. "Yo no dije que Protección Civil cometiera tráfico de influencias, sino que presuntamente, hay caso de corrupción ". El alcalde, lo cuentan testigos presenciales, le reconvino: "Angelito, tienes que rectificar". Y el concejal de Centro, 55 años, pelo a navaja, pronuncia con su voz ronca la frase clave: "¿Es que no me crees? ¿Acaso desconfías de mí?".Desde algunos despachos de Génova, 13, sede nacional del PP ' cobra cada vez más consistencia la teoría de que en el PP municipal falta disciplina. Algunos de los concejales más conocidos no dudan en reconocerlo, siempre que se mantenga el anonimato. "El gran éxito de Álvarez del Manzano en la oposición fue que se mantuviera unida. Lo consiguió porque no da órdenes, deja hacer. Pero claro, llegamos al poder y la cosa cambia".

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En las reuniones del Grupo Popular, Matanzo aconseja, critica a sus compañeros en su papel de hombre honesto-que-dice-las-verdades-en-la-cara; alguien, normalmente el alcalde, le regaña; Matanzo se levanta, dice que se sale, el que está al lado le engancha del brazo y lo vuelve a sentar. Otras veces se llega a levantar, se va, al cuarto de hora vuelve y no pasa nada, es Angelito y su carácter.

Otro compañero de Matanzo, hombre de plena confianza del alcalde, ha señalado en alguna charla privada que el concejal en otro tiempo "era disciplinado, obedecía siempre". "Pero ahora", agregó, no hace caso ni al alcalde; ni siquiera a Fraga. No hay quien lo contenga". Y eso que fue Fraga quien le introdujo en el partido.

El mismo edil explicaba por qué se incluyó a Matanzo en las últimas candidaturas: "Es el único concejal con el que nos veríamos obligados a explicar por qué no lo metemos en las listas y por qué sí. Hagamos lo que hagamos, con él tendríamos que explicarlo"., Matanzo tiene la habilidad suficiente de no desobedecer abiertamente al alcalde. Siempre se atribuye su apoyo. Igual que en Génova, donde el concejal de Centro entra preguntando a la gente: "¿Qué tal, chato, cómo lo estoy haciendo?". De forma que a los demás sólo les queda, abrir una discusión, o darle la razón. A sus compañeros les decía: "He visto a Mariano Rajoy [vicesecretario del PP] y me ha dado su apoyo". "El alcalde", cuenta otro concejal, "habló con Rajoy y éste le dijo que lo único que hizo fue escucharle, nada más".

Matanzo ha criticado en público la gestión de concejales de áreas, como el de Obras o la de limpieza. Pero ellos no le critican. ¿Por qué muchos concejales temen el enfrentamiento directo con él? "Bueno, no sé, yo no, porque a mí no me tiene pillado en nada. Creo que a mis compañeros tampoco. Pero es que, además, no es tan fácil, porque juega muy bien con ese paternalismo de 'no quiero que te ocurra nada, tengo un buen concepto de ti', y toda esa palabrería".

Otros concejales, como el de Coordinación, José Gabriel Astudillo, no dudan en recitar todo el memorial típico de virtudes que Matanzo se ha ido forjando con instinto político: honrado, cabal, inteligente y sincero. Y para ilustrar tal inteligencia, Astudillo recuerda el día en que Matanzo mostró a los medios de comunicación las entradas que tenía para asistir al festival organizado por más de 100 artistas contra él. "Los periodistas reservasteis el espacio para dar la noticia de Matanzo en el festival, y después él os dejó plantados. Eso demuestra que es un hombre muy inteligente". Lo que Astudillo no sabía es que Matanzo no acudió al festival porque el alcalde, una vez más, tuvo que ordenarle que retrocediera y se quedara en casa.

La hipótesis de destituirle como presidente de Centro se ha planteado en el PP. Pero la razón principal para desecharla es que "existen dudas razonables de que Matanzo procura más perjuicios que beneficios al partido". Además, habría dos escollos:

1. La turbulencia que puede generar en los medios de comunicación, un miembro suelto del partido acaparando flashes y micrófonos durante meses.

2. La idea de que Matanzo representa a un 4% de la derecha ultraconservadora que aún vota al PP la sostiene un compañero de Matanzo. "Aznar quiere acaparar el centro; pero sumando, no restando. Ese 4% es el que, entre otros factores, nos ha llevado a la mayoría absoluta. Por eso lo aguanta como puede".

Hay más: desde Génova, los dirigentes del PP han comunicado al alcalde que después de las próximas elecciones generales la oposición le tiene reservada una moción de censura. Si sale algo debilitado de ella, el apoyo de Matanzo no le vendrá mal, y el alcalde lo sabe.

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Sobre la firma

Francisco Peregil
Redactor de la sección Internacional. Comenzó en El País en 1989 y ha desempeñado coberturas en países como Venezuela, Haití, Libia, Irak y Afganistán. Ha sido corresponsal en Buenos Aires para Sudamérica y corresponsal para el Magreb. Es autor de las novelas 'Era tan bella', –mención especial del jurado del Premio Nadal en 2000– y 'Manuela'.

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