Hormaechea atribuye la dimisión de sus consejeros a la difícil situación económica

El presidente de Cantabria, Juan Hormaechea, compareció ayer en la Asamblea Regional para informar sobre la crisis del Gobierno, como habían solicitado por escrito ocho diputados del Grupo Socialista. El presidente cántabro, que en los 32 plenos celebrados desde que ganara las elecciones autonómicas en mayo de 1991 sólo asistió a 13, atribuyó estrictamente la causa de las dimisiones de los seis consejeros del Partido Popular "a las enormes dificultades económicas que atraviesa esta comunidad autónoma, no diferentes a las que vive nuestra nación".Hormaechea aludió a "presiones durísimas y fortísimas y a un carácter difícil [presumiblemente aludiendo a su propio talante], agravado por una serie de circunstancias" como causas que pudieran haber influido en los últimos sucesos políticos. El líder regionalista Miguel Ángel Revilla, afirmó que su grupo no podía compartir las explicaciones dadas ' por el presidente tratando de justificar las dimisiones de sus consejeros. "Usted entiende que les ha podido flaquear su estado de ánimo, pero ésas no han sido las razones. Se han ido porque ya no le aguantaban más, como le ha ocurrido al consejero que llevaba un año sin asistir a las deliberaciones del consejo porque no quería coincidir con usted o usted no le dejaba entrar", dijo Revilla.

Contestando al líder regionalista, que le reprochaba la existencia de 100 juntas vecinales carentes de teléfono, Hormaechea afirmó que "estamos ante una Cantabria infinitamente más rica que la del año 87. Todos los que vienen a esta tierra se sienten felicísimos de permanecer en ella."

El socialista Jaime Blanco confesó sentirse muy defraudado por el "bla, bla, bla" del presidente cántabro.