Los bancos centrales europeos perdieron más de 400.000 millones en septiembre
Los principales bancos centrales europeos perdieron entre 4.000 y 6.000 millones de dólares el mes pasado (de 400.000 a 600.000 millones de pesetas) en sus intervenciones para apoyar a las monedas más débiles del Sistema Monetario Europeo, según calculan los expertos que cita el diario The Wall Street Journal en su edición de ayer.Algunos analistas económicos consideran que las pérdidas (por la depreciación y devaluación que han sufrido las monedas que han tenido que ser compradas masivamente por los bancos centrales) han sido de alrededor del 10% de lo que las tropas aliadas gastaron en la Guerra del Golfo.
Los bancos centrales de España, Italia, Francia, el Reino Unido y Suecia utilizaron en su conjunto unos 100.000 millones de dólares (10 billones de pesetas) para intentar salvar a la peseta, la lira, el franco francés, la libra esterlina y la corona de los ataques especuladores, según declaró al diario neoyorquino el analista Avinash Persaud, del banco de negocios Union de Banques Suisse (UBS).
Los beneficiados
Los que se han beneficiado en la tormenta monetaria han sido los grandes bancos internacionales, como el Citicorp y Bankers Trust, dice el diario, además de los grandes especuladores. La fiebre especuladora empezó a principios de septiembre cuando se agudizaron las tensiones en el SME a raíz de la depreciación del dólar estadounidense a favor del marco alemán.
The Wall Street Journal señala que las ganancias de Citicorp, la mayor entidad bancaria de Estados Unidos, pudieron alcanzar los 200 millones de dólares en sólo un día (20.000 millones de pesetas).
Por su parte, el Bundesbank (banco central alemán) asegura que ha gastado 17.000 millones de dólares en apoyar la lira y se calcula que inyectó otros 40.000 millones de marcos (2,72 billones de pesetas) para apoyar a otras monedas. débiles, según el periódico económico. También el Bundesbank prestó unos 23.500 millones de marcos a otros bancos centrales europeos el pasado 16 de septiembre (miércoles negro) y otros 37.400 millones de marcos el 23 del mismo mes.
Con todo, las intervenciones no consiguieron parar las presiones especuladoras que finalmente provocaron que la lira italiana se devaluara un 7% para luego abandonar temporalmente el mecanismo de cambio europeo. La libra también tuvo que salirse del SME y la peseta, que todavía se mantiene en el mismo, ha sido también devaluada en un 5%.
No obstante, la crisis continúa impulsada por las conjeturas sobre las profundas diferencias que existen ahora entre los Doce, sobre todo entre Londres y Berlín, que anulan todo intento de coordinación monetaria.
