Los españoles, los "menos dignos de confianza", según un sondeo internacional

Los españoles son vistos como los más perezosos, menos modernos, menos inteligentes y, junto con los italianos, "menos dignos de confianza" por los ciudadanos de ocho países desarrollados, según una encuesta realizada por la consultoría británica Research International en 1991 y 1992 entre 6.500 ciudadanos de Alemania, Japón, EE UU, Reino Unido, Holanda, Francia, Italia y España. En el lado positivo -los españoles se mueven en los dos extremos, muy rara vez en posiciones intermedias-, son distinguidos, tras los italianos, como los más divertidos y solidarios.

Repasando los trece calificativos de la encuesta, los españoles son considerados los menos tocados por el éxito, la laboriosidad y la ambición, y, junto con los holandeses y los japoneses, los menos agresivos y arrogantes. El estudio ha sido uno de los presentados en el 451 Congreso de la Asociación Europea de Opinión y Estudios de Mercadotecnia, celebrado en Madrid, para exponer las tendencias en la CE.Alemanes y japoneses acaparan las mejores opiniones en cuanto a inteligencia y laboriosidad. Los primeros despuntan además con gran diferencia por su agresividad y arrogancia. Los japoneses son considerados los menos solidarios.

Los ciudadanos de EE UU son vistos como los más modernos y los holandeses como los más equilibrados en todos los sentidos, excepto en dos: son los más dignos de confianza y los menos elegantes. Los ingleses tienen la capacidad de suscitar opiniones encontradas; son considerados al mismo tiempo como las personas con mejor sentido del humor, pero también como las más aburridas. Pero si en algo destaca un pueblo sobremanera, a juicio de los demás, ése es el francés y su elegancia.

'Made in Spain'

Research International, que realiza estos sondeos anualmente con el nombre de Frontiers (Fronteras), concluye que tres países -EE UU, Japón y Alemania- tienen una clara imagen de liderazgo.

Otra parte de esta investigación se centra en la imagen que los ciudadanos de nueve países (los ocho anteriores, más Suecia) tienen de los productos de cada nacionalidad. Los made in Spain son conocidos como los de peor calidad, peor diseño y como los menos seguros, menos innovadores y menos fiables. Algo se salva: son vistos como los más baratos y, tras los franceses e italianos, como los más agradables. Los más innovadores y de mejor calidad son los japoneses, alemanes y norteamericanos.

Según el estudio, "la pobre actuación de España parece surgir del hecho de que los españoles tienen una imagen propia negativa. Quizá esto es debido a los muy rápidos cambios de los últimos años, que causan dudas en los españoles sobre su competitividad. Además, España carece de sus propias marcas internacionales y de productos que podrían ayudar a darle una mejor imagen".

Respecto a los servicios, España aparece como el país con menos facilidades para tomar un avión y hacer una llamada telefónica, y menos seguridad para la inversión y el ahorro. Ocupa una posición intermedia en cuanto a producción de buena música y servicios hoteleros.