Borrell propone al alcalde y a Leguina formar una sociedad anónima, para ampliar Barajas

El ministro de Obras Públicas y Transportes, José Borrell, quiere convertir Barajas en uno de los tres primeros aeropuertos europeos en un plazo de 20 años y enfocar el desarrollo de Madrid hacia esta zona, pero no quiere hacerlo solo. Borrell ha propuesto al Ayuntamiento y a la Comunidad de Madrid formar una sociedad anónima a partes iguales (33%) que gestione y busque el dinero necesario para completar la ampliación del aeropuerto -que requerirá una inversión estatal de 150.000 millones- con la creación de una nueva ciudad de oficinas y comercios junto a las pistas de esta instalación.

El ministro envió esta semana al alcaide de Madrid, Jose María Álvarez del Manzano, y al presidente de la Comunidad, Joaquín Leguina, una carta en la que los invitaba a una reunión y recordaba la intención del Gobierno de acometer cuanto antes la ampliación del aeropuerto. Este objetivo fue marcado por el Gobierno en el último Consejo de Ministros antes del verano.La reunión se ha celebrado en los dos últimos días, aunque no entre las más altas instancias de las tres administraciones implicadas. José Alberto Zaragoza, secretario general de Planificación y Concertación Territorial del ministerio, recibió en la tarde del lunes a los consejeros de Transportes y de Política Territorial de la Comunidad, Julián Revenga y José María Rodríguez Colorado, respectivamente. Y en la mañana de ayer se entrevistó con los concejales de Obras y Urbanismo, Enrique Villoria y Juan Ignacio Echevarría, respectivamente.

Zaragoza ha reconocido que la idea que se había estudiado desde siempre para desarrollar la operación de Barajas era la de formar un consorcio urbanístico entre las partes. Esta solución no parece ahora la más adecuada. Los expertos del ministerio, y también de la Comunidad, ven más factible y menos rígido constituir una sociedad anónima.

Preferencias distintas

El Ayuntamiento, gobernado por el Partido Popular, está dispuesto a meterse en otra aventura con los socialistas de la Comunidad y del ministerio para promover la ciudad aeroportuaria. Sin embargo, el alcalde no cree que una sociedad anónima, tripartita sea la mejor solución, informa Juan Antonio Carbajo. "No es que estemos muy satisfechos de cómo han funcionado los consorcios con otras administraciones, pero en este caso es la mejor fórmula", comentó. El sistema de los consorcios existe ahora para regular el transporte de la región, el realojamiento de la población marginada, la capitalidad cultural... "Seguro que nos ponemos de acuerdo y superamos los intereses partidistas", aseguró el alcalde.

La Comunidad, según su consejero de Transportes, Julián Revenga, prefiere una sociedad promotora, en la que pueda tener cabida el capital privado, "que no se eternice en la ejecución de los proyectos", informa Juan Carlos Sanz. La Comunidad entiende que el ministerio ha tomado partido por la fórmula de sociedad de gestión, siguiendo el modelo del Holding Olímpico de Barcelona o de la Sociedad Estatal Expo 92. Revenga cita como ejemplo el funcionamiento del Pasillo Verde Ferroviario, donde el Ayuntamiento (le Madrid y Renfe gestionan conjuntamente la renovación urbanística de la antigua línea férrea Príncipe Pío-Atocha para crear una línea de cercanías y generar suelo para viviendas, oficinas y servicios públicos.

Hay otro temor: en el primer momento de este tipo de operaciones se producen desajustes financieros y hay que empezar a pagar los intereses por los préstamos contraídos antes de poder recoger las plusvalías urbanísticas. Por esa razón se estima imprescindible la presencia de entidades bancarias en la operación.

Zaragoza asegura que en este asunto de la sociedad tripartita o el consorcio no habrá problemas para entenderse, pero se pronuncia por el primer sistema. "Si se forma una sociedad anónima sería más fácil la entrada de empresas públicas como AENA [organismo autónomo Aeropuertos Nacionales y Navegación Aérea] o el Sepes [sociedad de promoción de suelo estatal]", explicó. Revenga, por su parte, citó como posibles colaboradores autonómicos a la empresa de promoción de suelo regional Arpegio y al Consorcio de Transportes.

El ministerio se ha comprometido a enviar al Ayuntamiento y a la Comunidad esta misma semana un borrador de los estatutos de la futura sociedad. El ministro esperará una respuesta en un plazo no superior a 10 días. La sociedad, en cualquier caso, repartirá su capital y su gestión (representantes en el consejo de administración) a partes iguales.

El alcalde de Madrid avanzó ayer una primera contestación: "Mientras se estudia la ubicación definitiva del nuevo aeropuerto pueden pasar siete u ocho años, y las instalaciones actuales de Barajas no pueden esperar tanto. Hay que pensar en hacer algo ya. Puede, por ejemplo, habilitarse el aeropuerto de Torrejón ara determinados vuelos".

Earez del Manzano asegura que el Ayuntamiento tiene un gran interés en el proyecto porque significa apostar por el desarrollo del norte de la ciudad. "Es una zona competitiva donde ya se encuentran focos de actividad tan importantes como los recintos feriales o el Campo de las Naciones", dijo.

El Estado, a través del organismo autónomo Aeropuertos Nacionales y Navegación Aérea, financiará totalmente -con unos 150.000 millones- la ampliación del aeropuerto, con una nueva pista paralela a la actual y con una terminal modular de cuatro espacios. Cada módulo admitirá hasta ocho millones de pasajeros.

Zaragoza es tajante sobre los requerimientos de la compañía Iberia de una terminal propia. "En España es AENA la que hace los aeropuertos, y si- Iberia quiere una terminal específica, que se lo plantee a AENA y ésta. le dará todo el espacio que necesite sin ningún problema".

Para el ministerio, la ampliación de Barajas no supondrá. merma para la operatividad del, aeropuerto de Cuatro Vientos, dedicado a aviación general. (vuelos particulares y aerotaxis) o la base aérea de Getafe. A Torrejón, sin embargo, se le reserva, un futuro civil que se complemente con el comercial de Barajas: aviación general y deportiva con aeronaves ligeras, traslado de autoridades, emergencias, salvamento y rescates y operaciones contra incendios.