El Ayuntamiento acomete elevadas inversiones, a pesar de las estrecheces de su tesorería

El pleno celebrado ayer por el Ayuntamiento de Madrid aprobó acuerdos contradictorios. El debate discurrió primero según las pautas, si agrió al abordar el estado de las finanzas municipales y se volvió loco al discutir la entrada de capital privado en la empresa funeraria. Un préstamo de 6.000 millones, solicitado para responder a deudas inmediatas, encrespó a la oposición y puso de relieve las estrecheces de la tesorería municipal. El PSOE e IU advirtieron que, a pesar de tener las arcas vacías, el equipo de gobierno del PP se ha comprometido a invertir 7.600 millones en dos obras de difícil financiación.

El concejal de Hacienda, Fernando López Amor, reconoció en el debate que la tesorería municipal está en una situación "complicada". López Amor achacó todos los males a los años de gestión socialista municipal y, en general, a la política económica del Gobierno central.Juan Barranco, ex alcalde y portavoz del grupo socialista, dio a entender durante la discusión que el titular de Hacienda admitía que muchas empresas gestionadas desde el Ayuntamiento estaban prácticamente en quiebra, en bancarrota.

López Amor lo negó y aprovechó para recalcar -parafraseando el título de la obra de Marcel Proust En busca del tiempo perdido- la principal inquietud del actual equipo de gobierno en materia económica: recuperarse del mandato de Barranco. El concejal del PP señaló que el ajuste propugnado desde el Ministerio de Hacienda supondrá un recorte en los presupuestos del Ayuntamiento de Madrid del orden de los 15.000 millones de pesetas, fundamentalmente por el incremento del IVA.

El equipo de Gobierno ha recordado estos días que el Estado le adeuda unos 17.000 millones. El PP, en cualquier caso, ya ha empezado a tomar las primeras medidas de ajuste y, además de estar estudiando un recorte en el capítulo de las subvenciones, ha decidido "ralentizar numerosos proyectos".

Este debate se suscitó cuando el responsable del área de Hacienda daba a conocer al pleno que el pasado 22 de junio había solicitado un préstamo por 6.000 millones al Banco Español de Crédito y a la Caja de Madrid.

Gastar más que ingresar

El socialista Alfredo Tejero, ex concejal de Hacienda, y Francisco Herrera, portavoz de IU, se ensañaron con López Amor. Tejero aseguró que el Ayuntamiento debe a corto y medio plazo unos 46.000 millones y no puede pagar a sus proveedores. Además, subrayó que el Estado no es el culpable de todo, ya que este año entregará al municipio unos 80.000 millones.Tejero llamó "irresponsable" y "grosero" a López Amor y pidió su cese por decir que un Ayuntamiento debe gastar más que ingresar. El concejal del PP negó la interpretación y llamó "distraído" al edil socialista.

Por su parte, Herrera cifró la deuda a largo plazo en 119.000 millones. Herrera denunció que el Ayuntamiento gasta más dinero en intereses de préstamos (15.608 millones) que en inversiones (12.427 millones).

Entre otros proyectos, el PP llevó al pleno ordinario la aprobación de una paso subterráneo bajo la cuesta de San Vicente y la construcción de un edificio cerca de la M-3,0 para la Gerencia Municipal de Urbanismo.

Estas dos inversiones hipotecan dos importantes partidas de los presupuestos municipales de 1993 y 1994. El túnel de dos direcciones de Príncipe Pío, costará unos 1.800 millones (800 en cada ejercicio). El nuevo edificio de la M-30, que concentrará en una sede los más de 20 locales que la Gerencia de Urbanismo tiene ahora en toda la ciudad, supondrá un gasto de 5.909 millones (2.000 en 1993 y 3.909 el año siguiente). Para sacar adelante estos dos proyectos no habrá fórmulas mágicas. El dinero saldrá íntegramente de las arcas municipales.

Gerencia previó ingresar este año unos 17.000 millones por venta de suelo, pero el método no ha funcionado. Herrera lo ex presó así:: "SI este año no ha salido bien y no se han vendido par celas, por qué va a suceder en los próximos ejercicios; me parece [una operación] suicida, de una audacia sin límites".

Enrique Villoria, concejal de Obras, fue quien replicó al portavoz de IU: "Vamos a financiar estos proyectos vendiendo los más de veinte edificios antiguos en los que ahora estamos instalados, y que vamos a abandonar".

Los concejales del equipo de gobierno insistieron en que estas dos obras supondrán, a la larga, un ahorro. Villoria explicó, por ejemplo, que sólo con la reducción del número de policías que vigilan las instalaciones la plantilla se rebajará de más de cuarenta a sólo dos agentes.

El pleno abordó también un documento básico para el futuro inmediato de Madrid y que resume en 120 folios los criterios para la revisión del Plan General de Ordenación Urbana de 1985. El equipo de técnicos que ha elaborado este texto recomienda el pleno apoyo al transporte públicos y la creación de más calles para peatones.

El pleno acordó también dar el visto bueno -con las críticas de PSOE e IU- a la construcción de un paso inferior entre las calles de Alfonso XIII y López de Hoyos y de 19 nuevos aparcamientos. Finalmente, el Ayuntamiento decidió remitir al Consorcio Regional de Transportes la sentencia del Tribunal Supremo que anuló la municipalización, en 1980, de 21 líneas periféricas de autobuses. Las ocho empresas expropiadas disponían de 350 coches y 650 empleados.